Jaén no se lo merece

Estamos desencajados muchos jienenses de ver, año tras año, cómo transcurre el devenir de la ciudad que amamos. La ciudad que nos da la vida nos duele que nos saca el jugo del alma y nos parte en dos por la acción de una clase política que tiene que sentarse en paz a dialogar y trazar una ciudad que se deje de revanchismos. PP, PSOE e IU acumulan multitud de contradicciones y ya no sabemos a quién seguir. IU se declara verde y enarbola las motosierras. El PSOE acusa al PP de querer parar las obras del tranvía y olvida los parones que le dieron ellos a las de la plaza de la Constitución. Ahora el PSOE dice que la policía ha de actuar contra el PP por interponerse ante las máquinas y, cuando las obras de Martinez Molina, apoyó a los vecinos que hicieron lo propio. El PP, por entonces, denunció a los vecinos de aquella calle por parar las máquinas y ahora son ellos los que hacen lo mismo. Cuando el PP creaba infraestructuras, el PSOE -desde la Junta- lo frenaba todo en defensa de los restos arqueológicos... pero ahora que mandan ellos los hallazgos arqueológicos parecen no tener importancia. A todo esto el PP defiende los árboles con tenacidad pero se olvida de la pelambrera que dejó de arbolado entre el burger King y la cárcel vieja. Podría seguir, pero me produce desazón, pena y abatimiento. Porque, al fin y al cabo, lo que todos hemos de pensar es que nuestro Jaén es de todos los que lo habitamos.

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Por eso el pueblo llano no llega a entender el por qué de estas situaciones contradictorias de unos y otros, que creen que los jienenses no tenemos memoria, se creen que nos tragamos las falsas excusas. Es, como ya he dicho otras veces, como si nos tomaran por lelos y lo único que provocan todos con sus actitudes de ahora sí, luego no, y mañana viceversa que nos duela Jaén de pena. Estamos haciendo una ciudad basada en revanchismos, mal planificada, a golpe de venganza. Tampoco entendemos por qué la Junta invierte en Jaén sólo cuando en la capital manda el PSOE y castiga cuando manda el PP.

Votamos a políticos de Jaén para que mimen nuestra ciudad y se desvivan por ella. Juntos han de entenderse, ¿qué más da el color político? al final han de entender que su misión es dejar a sus hijos una ciudad mejor que la que ellos encontraron. Duele tanto mal que se hacen, que además nos lo clavan con estacas a cada uno de los jienenses en el corazón de Jaén que nos habría de unir y que está tan roto que nos sume en desesperación. ¿Podremos ver pronto algún pleno donde unos y otros construyan en positivo, aporten ideas y se escuchen en respeto demostrándose amor de hermanos entre todos?