El Belén Viviente se celebrará el sábado 19 de diciembre

A casi dos meses del acontecimiento, la Delegación municipal de Fiestas y Casco Antiguo ya se esmera en los preparativos para la nueva edición del Belén Viviente, que tendrá lugar el sábado 19 de diciembre, es decir, un día después del pregón oficial de Navidad.
El Belén quedará abierto al público a las 18.30 horas, para clausurarse a las 23.30; cinco horas para que arcenses y visitantes disfruten de una singular recreación a lo largo de un total de 30 escenas cuyo número quedaba confirmado durante la reunión de la organización con los colectivos y vecinos implicados en el montaje.
Este auténtico escaparate navideño alcanza su edición número veintiséis con el aliciente que ya le supone desde el verano de 2008 su declaración como de Interés Turístico de Andalucía, fundamentada en el atractivo de este acontecimiento al amparo de las calles del conjunto monumental arcense y en el elevado número de visitantes llegados desde todos los rincones de Andalucía; tantos como 25.000 que se han contabilizado en los años de mayor afluencia.
Estos preparativos vienen precedidos de la magnífica convivencia de la que disfrutaron los colaboradores del Belén Viviente y de las Cruces de Mayo junto a los tractoristas de las cabalgatas de Reyes y Carnaval, que tuvo lugar hace unos días en el Residencial Lago de Arcos, donde se forjaron algunas nuevas ideas que desarrollar este año.
El Belén Viviente de Arcos no cuenta con un presupuesto específico al implicar a varias delegaciones municipales, incluyendo las de Tráfico y Seguridad e infraestructuras, aunque el Ayuntamiento se ve obligado a pagar horas extras que se requieren por parte del personal laboral municipal. Sin embargo y según explicó la delegada de Fiestas y Casco Antiguo, Genoveva Medina, la inversión es mínima para la importantísima entrada de ingresos en el municipio el día del Belén Viviente, algo de lo que pueden dar cuenta los establecimientos hosteleros y hoteleros de la ciudad, que en algunos casos no dan a basto para atender la avalancha de público.
Además, todavía se debe celebrar la junta de seguridad local que analice o reedite las medidas de cara al Belén Viviente, el cual requiere sobre todo una atención máxima a la circulación de vehículos, llegada de autobuses de fuera de la ciudad y a las bolsas de aparcamiento que es preciso habilitar.
Sobre la participación de figurantes, unos 400, Medina entiende que resulta difícil la rotación porque cada vecino se identifica con la escena que viene representando tradicionalmente, aunque también observa cómo cada año se incorpora savia nueva que garantiza de algún modo que no decaiga la ilusión por trabajar en el inmenso montaje.

El cartel, listo para su publicación
Por otra parte, el viernes 27 de noviembre se celebrará la presentación del cartel del Belén Viviente, acto que tendrá lugar en la parroquia de San Pedro Apóstol a las 21.00 horas. Este año correrá a cargo de la Asociación de Mujeres Progresistas, a la que hay que atribuir la escena de la panadería del Belén que se ha instalado estos años en la calle Bóvedas. Genoveva Medina agradeció a esta asociación el esmero con que monta su escena y su esfuerzo por mejorarla año tras año, y de forma particular a su presidenta, Luisa Ferro.
El cartel de este año, una vez fallado el concurso, es obra del fotógrafo jerezano afincado en Arcos Diego García Silva, un trabajo que ya está en imprenta listo para su presentación pública y para su distribución por toda Andalucía.

“El Belén sólo aspira a mantener su categoría”
Según la delegada municipal de Fiestas, poco más se le puede pedir a un acontecimiento de la magnitud del Belén Viviente, cuya organización ha ganado enteros a medida que ha ido adquiriendo experiencia año tras año. Así, Genoveva Medina apunta que “sólo aspira a mantener su categoría”, que no es poco, pues el listón está muy alto. No obstante, y una vez que los trabajadores municipales ya preparan la recreación, se intentará “mejorar cada escena”, admitió la delegada, que también se mostró convencida del esfuerzo que harán los vecinos por disimular en sus zaguanes y casas los elementos modernos que pudieran distorsionar con el ambiente que recrea la época en que Jesús vino al mundo. Además, el Belén ha ido adquiriendo un importante patrimonio material durante los últimos años, desde las ropas que se diseñaron exclusivamente para los figurantes, hasta los artículos de menaje y enseres para las diferentes escenas. “Lo tenemos a buen recaudo y sabemos que hay que cuidarlo, pero, insisto, habrá que mejorar”, señaló Medina.