Desde que el pasado jueves saliera a la luz la intención del Ayuntamiento de privatizar el 49% de la empresa municipal de Aguas de Huelva, ha ido creciendo la tensión
Desde que el pasado jueves saliera a la luz la intención del Ayuntamiento de privatizar el 49% de la empresa municipal de Aguas de Huelva, ha ido creciendo la tensión. Primero, el primer teniente de alcalde y presidente de la entidad, Francisco Moro, suspendió el consejo de administración del pasado viernes cuando los trabajadores entraron para pedir explicaciones, y a dos días del pleno en el que se debatirá el proceso y en el que la plantilla estará presente, la batalla política se recrudece.
Mientras el PP asegura que “no subirá” la tasa, aunque la decisión final dependerá del nuevo sosio, el PSOE destaca que el equipo de gobierno “engaña a los trabajadores” y exige el mantenimiento de la plena titularidad pública.
El teniente de alcalde de Interior y Personal en el Ayuntamiento de Huelva, Saúl Fernández ha asegurado que el modelo que presentará el Consistorio para gestionar Aguas de Huelva “deja de manifiesto expresamente que la tasa del agua no subirá”, aunque el nuevo socio podrá presentar alegaciones y se verá “si se baja o se sube”, al tiempo que destacó que “no se trata de una venta, sino de una ampliación de capital” y volvió a garantizar que “se respetarán los derechos de la plantilla”.
Por su parte, el PSOE subraya que “en agosto el Ayuntamiento se firmó un acuerdo con los trabajadores afirmando que la empresa seguiría siendo pública, un engaño más porque ahora quieren hacer caja”.