Como principal artífice de las fiestas recién clausuradas, el delegado municipal del área, Raúl Lozano, ha señalado que “siendo justos, la valoración es positiva. Hemos trabajado mucho desde la Delegación, y en coordinación con Medio Ambiente, Tráfico, Seguridad Ciudadana, etc. Es positiva por la participación de arcenses y gente de otras localidades y turistas”. Para el delegado, hacía años que no se veía tanto turismo en la calle, para señalar que es un hecho que comenzó a notarse de forma muy especial en los hoteles desde que comenzó la Semana Santa.
Lozano considera al respecto que el factor meteorológico ha sido determinante para que no faltara público en cada cita. En este sentido, como han hecho otros compañeros, ha agradecido el papel de las fuerzas y voluntarios implicados en el Toro del Aleluya, más de 80 personas bien coordinadas. Sobre la fiesta, confirmó los dos traslados hospitalarios con heridos fuera de peligro y, en este sentido, el escaso número de incidentes respecto a otros años. No obstante, espera que estas situaciones no se den en lo sucesivo.
Igualmente, admitió que pese a la increíble avalancha de gente en el centro de la ciudad, no se registraron altercados de gravedad, de ahí que agradeciera el sentido común y la compostura de vecinos y visitantes en plena movida del Toro.
Por último, el delegado de Fiestas está convencido de que tanto la Semana Santa como el Toro del Aleluya han supuesto “una inyección económica para los negocios de Arcos, para que sobrevivan el resto del año. Esperemos que esto sea sinónimo de que vamos a mejor que atraigamos a más turistas”.
El delegado asegura que su área ya trabaja en nuevas ideas para el Toro del Aleluya del próximo año porque este año, por falta de tiempo, no ha habido tiempo material; medidas para “mejorar el recorrido y darle más contenido a la fiesta”.
