La Asociación de Vecinos Costa de la Luz de Zahora, pedanía barbateña, convocaba para este fin de semana una concentración protesta en demanda de servicios básicos para la zona y contra “la dejadez y olvido” por parte del Ayuntamiento de la localidad.
Cuestionado el alcalde, Miguel Molina, sobre dichas demandas y sobre la protesta en sí, señalaba que “Soy sensible a esta situación. De hecho, hemos pedido a la Junta de Andalucía subvenciones para la redacción de cinco planes especiales ambientales, que es el máximo que se nos permite desde dicha administración autonómica. El objetivo es poner en marcha esos planes lo antes posible”.
En este sentido, el primer edil asegura contar “con un convenio ya elaborado desde hace cuestión de un mes, el cual inicié personalmente desde hace unos seis meses. Este convenio ya ha está concluido y se lo quiero presentar a los vecinos y vecinas pero desde la Asociación Costa de la Luz no ha querido sentarse”.
El convenio “se centra en el inicio de la obra pública para el abastecimiento de agua, la fibra óptica, el soterramiento de la línea y el arreglo de carriles y carreteras. Pero claro, evidentemente es algo que deben abonar ellos y como tenemos una empresa concesionaria que está dispuesta a adelantar el dinero para la obra, como es Aqualia, la idea del convenio es que los vecinos y vecinas puedan abonarlo con posterioridad mediante contribuciones especiales u otra figura que ofrece facilidades de pago y de forma flexible dependiendo de las posibilidades de cada uno”.
Molina insiste en que “ofrezco soluciones a un problema que viene de lejos y que ningún gobierno anterior ha solucionado. Algunas asociaciones han elaborado sus propios proyectos para regularizar sus viviendas y su zona. Sin embargo, veo falta de iniciativa por parte de la Asociación Costa de la Luz. Nosotros queremos hacer las cosas, y algunas de ellas no las hemos empezado por estar en época electoral es la elaboración del nuevo PGOU”.
Un nuevo PGOU que “quiero comenzar a trabajar desde septiembre o comienzos del próximo año con el objetivo de dar solución a los que están por debajo de los que están por debajo de los quinientos metros de la línea de costa. Y es que como señala el convenio anteriormente citado, es una solución prevista en la LISTA (la ley de suelo de la Junta) en la que se habla solo de esa cuota de quinientos metros. Y es que le hacemos la obra pero también tenemos que tener en encaje jurídico para que puedan enganchar y es que la realidad es que sus viviendas no cuentan con ningún papel, son viviendas irregulares”.
Respecto a la situación de la vivienda en Zahora “hay de todo. Hay viviendas antiguas y otras que se siguen construyendo. Para estas últimas firmamos un convenio con los municipios de Conil y Vejer, además de la Junta, para un control más exhaustivo en el que se implique más la administración autonómica. En muchos casos no se respetan los linderos, ni otras cuestiones. Por ejemplo cuando nos dicen que el camión de la basura no llega a su zona, pero es que hay veces que no puede ni pasar”.
Pero el primer edil recuerda que “no es solo darle el agua, también contar con la figura jurídica para que puedan conectarse ya sea a través de una innovación de plan (algo que ya han hecho unos 250 vecinos), o tendrán que contar con un AFO (Asimilado Fuera de Ordenación)… Luego tendremos que tener un control del uso de esa agua y de las fosas sépticas para no perjudicar aún más la situación medio ambiental de la zona”.
Miguel Molina es “partidario de meter la infraestructura y se está ultimando los detalles para la depuradora, la única de la historia en la zona, para dar cobertura a El Palmar, Caños y Zahora. Esa depuradora debe tener luego contenido y es que sin alcantarillado poco a tener que depurar. Estoy por la labor como alcalde, y ellos lo saben, de acelerar los procesos, es lo que ellos mismos están demandando. Y, me voy a poner una medalla si me lo permite, es que tienen la suerte de contar con un alcalde como yo que respeta la visión que esa asociación vecinal tiene, es decir, ver Zahora como un casco antiguo. Pero sí es cierto que tienen que poner de su parte para poder desarrollarlo. Han trabajado con dos arquitectos que les he enviado pero no les ha gustado ninguno, mientras que les pedía que me mandasen ellos un arquitecto que les avale pero nunca ha ocurrido”.
El problema es que “para desarrollar una zona, aunque sea respetándola como casco antiguo, también hay que dotarla de zonas verdes, equipamientos como un colegio público, el cual es imposible sin suelo urbano por más que se quejen. No todo es pedir, pedir, pedir, también deben aportar”.
Eso sí, “no podemos olvidar que estamos en época electoral, de ahí la manifestación y que no se quieran sentar con nosotros para firmar el convenio”.
El regidor reitera que “ellos esgrimen una sentencia por incumplimiento de la Comisión de Seguimiento, pero lo cierto es que me reúno con ellos más que con ninguna otra asociación de Barbate. Y nos sancionaron con más de 20.000 euros. Ellos dijeron que usarían ese dinero para arreglar ciertas cosas de Zahora como tapar boquetes en los carriles porque no era su intención lucrarse, pero no han hecho nada”.
Y la urbanización “debe ser abonada por su parte. Es que compraron un suelo rústico y construyeron sobre el mismo. Y claro, el Ayuntamiento no te lo va a convertir en urbano con el dinero de los vecinos y vecinos que sí han actuado con legalidad y que pagan sus impuestos. Lo tuyo lo pagarás tú. E insisto, pongo sobre la mesa formas de pagos flexibles y acordes a cada bolsillo. Nuestra estimación habla de una horquilla de diez a quince mil euros dependiendo de la dimensión del terreno y la vivienda. Pero el pueblo entero de Barbate no te va a pagar que tu suelo sea urbano, algo que te generará unos enormes beneficios después de haber actuado fuera de la legalidad. No, eso no es posible. Cada uno se paga sus propias infraestructuras. El vecino de Barbate que ha pagado las suyas no va a pagar también las de otros. Cuando compras una casa urbana ya viene repercutida en el precio del promotor. En este caso, ellos no han pagado esos impuestos”.
Reconoce Molina que los vecinos y vecinas “ahora están empezando a pagar IBI, es cierto, pero los casi treinta años que no lo han hecho no lo dicen. Y pagan IBI porque realizamos una revisión catastral con un dron y es lo justo”.