Aunque parezca mentira, este año el mes de agosto se quedó sin cabañuelas porque algunos Dioses eligieron nuestro pueblo para tomarse sus vacaciones veraniegas. Y no es de extrañar, pues nuestro pueblo tiene suficientes encantos para cautivar a los Señores del Olimpo y hacer de Barbate su residencia veraniega. Algo así como lo que han venido haciendo nuestros monarcas en Mallorca. Solo que aquí se goza de una naturaleza más clara, más diáfana, y más baratita, porque como está la cosa, hasta en el Olimpo lo estarán notando.
Seguro que Eolo, ha tenido algo que ver, porque después de anunciarse una borrascosa “levantera” con nudos marinos y flechas sioux, apaches y comanches incluidas, hizo retrasar tanto su llegada, que respetó incluso el festival que el Taller de Música IES Torre del Tajo organizaba en la Plaza del Faro a beneficio de Cáritas, haciendo llegar solo algunos resoplidos que fueron acallados por las ilusionadas voces de los alumnos del Taller, que como el año anterior, expandieron armónicos decibelios para llenar la plaza de color y alegría. Luego desató su furia durante algunos días, pero sin causar daños mayores, solo que el atún, tuvo que dar más vuelta que el “Gusanito del Birlongo”.
El Dios Neptuno cada noche se tumbaría junto al acantilado del Tajo, para que las gotas de agua dulce rebajara su salinidad y furia y testimoniando su placer y tranquilidad, contemplando la playa de la Yerbabuena, hizo coincidir una de sus grandes mareas con la esplendorosa fase lunar, que proyectó sobre la piñera toda la plata del plenilunio y vistió de verde luna el camino de los más de cuatrocientos participantes que fueron hasta la Torre del Tajo, en el BreñaTrial Moom Barbate 2014.
Baco también hizo de la suya alegrando con su etílico elixir las noches de los jóvenes más atrevidos, que se aventuraban en descubrir detrás de las madrugadas los amores más limpios y puros bajo el manto celestial del bello paisaje, hasta que la aurora les despertaba.
Heracles, al más puro estilo espartano, nos trajo una vuelta ciclista que paso tan rápida ante nuestra retina, que en vez de representar la dinámica serpiente multicolor, que con los colores de las camisetas, los ciclistas suele desplegar allá por donde pasan, más se pareció al desfile de la victoria, por el nutrido números de guardias civiles vigilando las camisetas naranjas del Foro Ciudadano, y custodiando el tramo del matadero hasta la salida del pueblo, con motos y vehículos de la benemérita. Así que desde el helicóptero, solo se apreciaría el verde de sus uniformes. Bueno habrá que animar a los jóvenes del Foro Ciudadano, para que las camisetas naranjas se vean como banderas de libertad en las puertas del Retín o en algunos de los desembarcos en la playa.
Por fortuna, ninguno de estos dioses mitológicos son perjudiciales. Pero cuidado con los dioses que nos visitan que, por desgracia, entre otros, hay dioses del deseo, dioses de la especulación, dioses del engaño, o dioses de la farándula, que cuando convierten a los pueblos en su residencia veraniega, anulan su personalidad, acaban con sus costumbres y encarecen su nivel de vida, para convertirlo en un pueblo fantasma durante el resto del año.