Tras el “jarro de agua fría” que supuso el adelanto de las elecciones generales para el próximo 23 de julio, los funcionarios de los Cuerpos Generales de la Administración de la Justicia han decidido en asamblea reanudar las protestas el próximo martes con una cacerolada en la capital gaditana.
Continúan con la huelga indefinida para reclamar una subida salarial de hasta 430 euros, al hilo del incremento que lograron los Letrados de la Administración de la Justicia (LAJ) tras dos meses de huelga, además de la paralización de la tramitación de la Ley de Eficiencia Organizativa (LOEO).
Desde el comité de huelga, constituido por STAJ, CSIF, CCOO y UGT, critican que la ministra de Justicia, Pilar Llop, se cierre en banda y siga sin negociar con un colectivo que cuenta con 45.000 profesionales en todo el país -de los cuales más de 1.200 están repartidos por los 14 partidos judiciales de la provincia y 200 desempeñan sus funciones en la capital gaditana.
Avisan de que van a recrudecer sus acciones de presión y de que no piensan tirar la toalla pese a que la huelga, con un seguimiento de más del 64%, les esté costando ya el dinero después de más de un mes.
