Cádiz

Fiasco para recuperar la salina de La Dolores

El convenio firmado por el anterior equipo de Gobierno y la Asociación Bahía de Cádiz en 2022 expiró un año después sin que se avanzara nada en el proyecto

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  • Firma del convenio para la recuperación fallida de La Dolores. -
  • El Ayuntamiento busca ahora vías de colaboración público-privada para la puesta en valor y fomentar el uso de la zona

El entonces alcalde, José María González, Kichi, firmó el 19 de abril de 2022 un convenio con la Asociación Bahía de Cádiz “para la promoción del desarrollo  sociocomunitario de la Bahía de Cádiz”. El objeto del documento, explicó por su parte Carlos Paradas, a la sazón delegado de Fomento y Empleo y vicepresidente del Instituto  de Fomento, Empleo y Formación (IFEF), era “impulsar y facilitar la participación cívica en el diagnóstico, análisis, diseño, planificación y ejecución de estrategias y actividades implicadas en la construcción de la inteligencia territorial al servicio de los intereses generales”.

“Queremos aprovechar la sabiduría del colectivo CR9 (integrado en la asociación) en todos los ámbitos en los que se mueve y así trabajar conjuntamente con la sociedad civil en el desarrollo de estrategias, proyectos y acciones concretas de impulso de la empleabilidad en la población gaditana”, agregó.

Y, entre las actuaciones concretas, destacó la intención de rehabilitar el complejo salinero en la salina de La Dolores, espacio limítrofe con el Río Arillo y San Fernando. La actuación planteada era ambiciosa, con un presupuesto de entre un millón y un millón y medio de euros que el equipo de Gobierno quería que fuera aportada por los fondos Next Generation, a través de los Planes de Recuperación, Transformación y Resiliencia (Perte) de Economía Circular, Digitalización del ciclo del agua, y del agua.

El proyecto preveía la construcción de un edificio principal con un salón de actos y espacio para exposiciones y, en la primera planta, talleres de trabajo e investigación; un segundo inmueble para aulario; y otro más para laboratorio de investigación gastronómica propios de las salinas y los esteros, con observatorio de aves en la cubierta.

En una primera fase, se abriría el centro de visitantes y una salina-escuela, para posteriormente acometer la rehabilitación integral de la salina y esteros y chiqueros de la salina artesanal para su explotación extensiva. “Hay que aprovechar todos los recursos para fundar un sistema de empleabilidad digno para las generaciones venideras”, apuntó Pedro Castilla, uno de los coordinadores de la asociación junto con Fernando Díaz.

Todo quedó, sin embargo, en aguas de borrajas. Durante un año, no se avanzó en nada y el convenio expiró, finalmente, el 19 de abril de 2023 al no ser renovado. El actual coordinador del Área de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Cossi, ha informado a VIVA CÁDIZ que ahora el Ayuntamiento “busca y estudia vías de colaboración público-privada para recuperar la zona”. “La intención -ha detallado- es su puesta en valor y fomentar su uso público, ya que es una manera de conectar a los gaditanos con el Parque Natural de la Bahía de Cádiz”, ha concluido.

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