El rincón gastronómico del Mercado Central de Abastos de Cádiz amplía su oferta culinaria con la llegada de nuevos aires procedentes de Italia.
Francesca Misuraca y Vittorio Carnemolla, romanos y residentes en Chiclana de la Frontera, abren la que contabiliza su tercera pizzería Di bocca in bocca en Cádiz y sus alrededores, ya que lo suyo no en una aparición, sino un esperado regreso.
Contrariamente a lo que dirían Astérix y Obélix, estos romanos no están para nada locos y regresan a la capital para volver a deleitar a los aficionados a los sabores italianos con un buen puñado de buenas pizzas y otras delicias del país de Garibaldi.
Los puestos 110 y 111 acogen desde ayer en la inauguración oficial y desde hoy para el público en general a la pizzería en la que la clientela en vez de ser preguntada por lo que le gusta, se le indaga por lo que no y así resulta la tabla de porciones que llegan al comensal.
El local de Francesca y Vittorio se mantendrá abierto de martes a sábado en el horario de mediodía, ya que en las noches y durante los domingos, esta pareja de empresarios regresan a su otro establecimiento, ubicado en la urbanización El Pinar de los Franceses de Chiclana.
El origen de Di bocca in bocca se sitúa años atrás en la gaditana calle Nereidas. Allí, además de con una decoración cambiante merced a los collages de fotografías de clientes, estos hosteleros se metieron en el bolsillo a la clientela de la capital con simpatía y con sus inconfundibles pizzas y pastas y con su fin de comida regado con Asti Spumante.
De ahí, y por causas familiares, dejaron la capital para abrir el reseñado establecimiento de la calle El Oso y el Madroño de Chiclana.
Hoy, sin dejar el chiclanero lugar, abren sus puertas en la Plaza para compartir rincón gastronómico con Gadesbeer, Gadisushi o Argendarte, entre otros. Desde hoy, el acento romano y el aroma de albahaca estarán más presentes por la calle Libertad.