La Guardia Civil mantiene abierta una investigación por el "sabotaje intencionado" cometido el 12 de diciembre de 2015 contra la torre del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) de Conil de la Frontera (Cádiz), sin que se hayan producido hasta el momento detenciones relacionadas con estos hechos.
Así lo han indicado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil, que han señalado que se continúa con la reparación de los elementos que resultaron dañados como consecuencia del mencionado ataque.
Entretanto, continúa en funcionamiento la estación móvil puesta en marcha tras los hechos, de manera inmediata, para el desempeño de las funciones de la torre del SIVE. De esa manera, la zona no está desprotegida como consecuencia de esta acción delictiva, que se atribuye a intereses narcotraficantes.
Cabe recordar que los hechos tuvieron lugar durante la noche, cuando un todoterreno robado y cargado con bidones de gasolina fue estrellado contra la torre del SIVE de Conil.
Tras este suceso, el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, comentó que la investigación apunta a que el sabotaje fue desarrollado "por mafias del narcotráfico, o bien por personas vinculadas al narcotráfico que reciben a cambio de ese sabotaje recursos económicos".
Asimismo, Sanz señalaba que el daño causado tiene "un coste económico importante" que desde el Gobierno se trataría de reponer "lo antes posible". Tras destacar la "importante" inversión realizada por la Administración central para tener a pleno funcionamiento el SIVE en toda la costa, señalaba que se trabaja en "buscar los mecanismos de protección y seguridad" frente a nuevos intentos de sabotaje.
El SIVE de Conil se encuentra en la zona del faro, que es "muy sensible" e "importante", según el propio Sanz, en lo que supone la llegada de inmigración y la lucha contra la delincuencia organizada, especialmente la vinculada al narcotráfico.
