De dichos resultados informaron ayer en Madrid, durante una rueda de prensa conjunta, varios de los responsables de este estudio internacional, en el que han participado los centros médicos madrileños Hospital Clínico San Carlos, Hospital de Móstoles y Hospital Santa Cristina, aparte del Clinic, el Institut Catalá d’Oncología y el Hospital Vall d’Hebron, de Barcelona.
Este estudio, en el que han participado 18.664 mujeres de entre 15 y 25 años de 14 países de Europa, Asia-Pacífico, Estados Unidos y Canadá, y Latinoamérica, de la cuales casi 400 proceden de España, se ha centrado en la investigación de la eficacia de la vacuna Cervarix, de GlaxoSmithKline, que en España, en concreto, se distribuye en siete comunidades autónomas.
El resto de las comunidades suministra otra vacuna frente al cáncer de cuello de útero denominada Gardasil, fabricada por Sanofi, y que es la relacionada con el caso de unas niñas que sufrieron trastornos cuando se les administró, aunque finalmente las autoridades sanitarias concluyeron que no existía vinculación entre dicho mal y el fármaco.
Sólo en España, según las cifras, se contabilizan 2.100 nuevos casos de este tipo de cáncer al año, con una mortalidad anual de 740 mujeres.