La Comisión Europea expresó este jueves sus condolencias por el supuesto ataque yihadista de ayer en Algeciras, en el que murió el sacristán Diego Valencia y quedó herido el sacerdote Antonio Rodríguez, y también por el que hubo en Schleswig-Holstein (Alemania), con dos muertos y siete heridos.
"Permitidme empezar nuestros anuncios de hoy extendiendo nuestras condolencias y nuestro consuelo a las familias de los ataques con cuchillo que ocurrieron ayer en Alemania y en España", dijo el portavoz jefe del Ejecutivo comunitario, Eric Mamer, al comienzo de la rueda de prensa diaria de la institución.
"Nuestros pensamientos están con todas las víctimas, sus familias y sus comunidades", afirmó.
Yasin Kanza, un lobo solitario radicalizado en los últimos tiempos, según la investigación, entró ayer a dos iglesias en Algeciras, la capilla de San Isidro de la Iglesia de Santa María Auxiliadora y la de La Palma, al grito de "muerte a los cristianos y Alá es grande".
Sin antecedentes policiales de ningún tipo ni en España ni en otros países de la Unión Europea, sí estaba, sin embargo, en el punto de mira de las fuerzas de seguridad debido a su radicalización, según indican a EFE fuentes de la investigación.
Aunque desde el Ministerio del Interior señalan que no estaba "siendo seguido por agentes de información o de otros grupos policiales, ni en los últimos días ni anteriormente".
Desde junio del año pasado tenía un expediente de expulsión de España, adonde llegó en 2019 de forma irregular.
El ataque en Alemania se produjo cuando un hombre armado con un cuchillo se lanzó contra los pasajeros de un tren regional en el trayecto entre Kiel y Hamburgo (norte del país), en el que viajaban unas 120 personas, según fuentes policiales.
Esas mismas fuentes explicaron que el atacante -ingresado en el hospital- es un palestino de 33 años de la franja de Gaza con trastornos mentales.