El Partido Popular de San Roque ha manifestado su "rotunda repulsa" a la actitud, "tanto de la concejala de seguridad, como la del alcalde", en el asunto de la agente de la Policia Local que necesita un cambio de turno para su conciliación familiar y cuidados de su madre.
"Conocemos esta situación casi desde el principio", comenta la portavoz del PP, Marina García, "pero hemos esperado a que la concejala de Seguridad reconsiderase su postura, postura que hasta el momento permanece inalterada".
La popular sostiene que "dicha agente lleva con esta situación desde el pasado mes de junio, que es cuando intenta ponerlo en conocimiento de la concejala, pero ésta jamás le contesta, y no es hasta que reciben la demanda cuando se ponen en contacto con la agente por teléfono, y nunca la concejala".
García Indica que "no entendemos cómo puede mostrarse tan fría con un asunto tan delicado y sensible, teniendo en cuenta además que, como la agente, la edil de seguridad también es mujer y sabe lo complicadas que son estas situaciones".
Así, la edil del PP mantiene que "esta actitud dice muy poco a favor de la concejala, no siendo capaz de empatizar con una mujer que está pasando por un momento extremadamente delicado, y que lo único que pide, que además está en su derecho y es legal, es ese cambio de turno, que incluso le supone a la agente una bajada en su sueldo".
Por todo ello, califica de "lamentable, bochornoso e inhumano" este "último escándalo" en San Roque.
"De nuevo se impone la soberbia y la actitud dictatorial de un alcalde y de su concejala de Seguridad que anteponen su cabezonería" a cualquier gesto de humanidad con la plantilla, en este caso con la agente", concluyen, dejando claro su apoyo incondicional a esta trabajadora "y esperamos que la ley ponga las cosas en su sitio".
