Chiclana se beneficiará de una nueva subvención destinada al sistema para el control y la gestión de una zona de bajas emisiones (ZBE), que se enmarca en la Agenda Urbana Chiclana 2030 cofinanciada por la Unión Europea a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y los Fondos Next Generation. Así lo han anunciado el alcalde de Chiclana, José María Román; quien ha comparecido en rueda de prensa junto a la delegada municipal de Urbanismo, Ana González, y al delegado municipal de Tráfico, Jose Vera.
En este sentido, el alcalde ha recordado que es la segunda vez que Chiclana recibe ayudas para estas zonas de bajas emisiones, en concreto de la Secretaría General de Transporte y Movilidad del Gobierno de España. “La primera convocatoria es la correspondiente al año pasado, en la que el proyecto tenía un presupuesto total de 4,6 millones de euros, de los que el 1,2 era de aportación municipal, y que tenía como fin el calmado de tráfico en el entorno urbano a través de la instalación de cámaras de control, así como otros proyectos como la reurbanización de la calle Fierro ya ejecutado o la nueva pasarela peatonal junto al Cerro del Castillo y el último tramo de Molino Viejo, así como el intercambiador de transporte actualmente en ejecución”, ha recordado José María Román, quien ha indicado que “ahora en 2023 se nos ha concedido provisionalmente una ayuda para un proyecto con una inversión total de 3.783.444 euros y que incluye una aportación municipal del 10 por ciento, por lo que la ayuda asciende a 3,4 millones”.
En este sentido, gracias a la aprobación de esta nueva subvención, el Ayuntamiento de Chiclana llevará a cabo cuatro importantes proyectos. Un primer proyecto de calmado del tráfico en el centro urbano, con una inversión de 328.652 euros y que prevé la instalación de señalética, radares, pasos de peatones iluminados y semáforos, todo ello para lograr que las calles sean más amables para el peatón. Asimismo, se destinará 1.870.800 euros para la mejora de la carretera de la Rana Verde y que complementará el proyecto existente en esta misma vía.
Por otro lado, se procederá a la mejora de itinerarios peatonales y la accesibilidad en el entorno de zona de bajas emisiones por valor de 1.330.512 euros y que supondrá la conversión de plataforma única en las calles Iro y Arroyuelo, tal y como ha sucedido en la Alameda del Río y en la calle Fierro. Y, por último, se llevará a cabo el proyecto de información al usuario en tiempo real en el servicio de transporte público urbano, con una inversión de 253.479 euros, por el que el ciudadano podrá conocer el tiempo de espera de los autobuses urbano, tanto en una pantalla en la marquesina como en aplicación móvil.
