Con el día de Reyes, las fiestas navideñas se dan por terminadas. Y la pandemia encara la tercera ola, la cual parece todo un hecho ante el aumento de contagios de las últimas semanas. Las reuniones sociales y la presencia de muchas personas llenando las calles y centros comerciales ya están pasando factura. Si a la víspera de Nochebuena llegamos con una tasa de incidencia de 144,5 casos por cien mil habitantes, este 5 de enero estaba en 160,8.
En las dos semanas que dura la Navidad, se han notificado un total de 1.663 contagios de coronavirus en la provincia cordobesa. El 28 de diciembre fue el día con menos positivos con 48, mientras que este 6 de enero se llegó al pico más alto con 217 casos en un día superando al 3 de enero, cuando se llegó a 212. El lado más duro de la enfermedad son los fallecidos que está causando. 51 cordobeses han perdido la vida entre el 22 de diciembre y el 6 de enero. Este miércoles se recuperaron otras 27 personas del COVID-19, mientras que otras siete ingresaron en los centros hospitalarios repartidos por la provincia. En estos momentos hay varios municipios que superan la tasa de 500 casos por cada 100.000 habitantes.
La mejor noticia es que ya ha comenzado la campaña de vacunación. Lo hizo el pasado 27 de diciembre en las residencias de mayores y entre sanitarios del Reina Sofía. Aunque de momento el ritmo es más lento del esperado.