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La Ryder Cup sigue siendo de Europa

Los de Paul McGinley partían este domingo con cuatro puntos de ventaja sobre los de Tom Watson

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El equipo de Europa reeditó este domingo su victoria en la Ryder Cup tras imponerse en la edición 2014, que se disputó en el recorrido escocés del Gleneagles Hotel, después de imponerse por 16,5 a 11,5 a los Estados Unidos, tras una jornada de individuales donde los de Paul McGinley no permitieron ninguna remontada de sus rivales.

   Los de Paul McGinley partían este domingo con cuatro puntos de ventaja sobre los de Tom Watson, pero no dejaron que hubiese excesiva tensión como hace dos años en Medinah (Chicago), pese a que el inicio de la jornada no fue el mejor. Sin embargo, el marcador se fue tornando de color azul y a falta de la conclusión de cuatro partidos, los locales ya habían hecho su trabajo y festejaban el éxito. El honor de confirmar el triunfo fue para el galés y debutante Jamie Donaldson.

   De este modo, el Viejo Continente se confirma como el gran dominador en la actualidad de la Ryder Cup, competición que conquista por tercera ocasión consecutiva tras las ediciones de 2010 y 2012, repitiendo lo logrado de 2002 a 2006. Por su parte, los americanos continúan sin ganar en suelo europeo desde 1993, una racha que intentarán romper en 2018 cuando el evento bianual visite por segunda ocasión en su historia un país no británico, Francia.

   Europa confirmó su teórico favoritismo desde el primer día. Avalado por el crecimiento de sus jugadores, reflejado en el ránking mundial y en los 'Grand Slam', el antaño mando autoritario de los Estados Unidos ya no es tal. McGinley dio con la tecla en los dos primeros días, sobre todo en los 'foursomes', lo contrario que el 'viejo zorro' Watson, que no pudo repetir lo logrado en The Belfry hace 21 años, y para este domingo la táctica le salió mejor al irlandés.

   Con el recuerdo de lo sucedido hace dos años en Chicago y la milagrosa remontada europea, los americanos estaban dispuestos a no rendirse pese a la desventaja, similar a la de 2012 para Europa. Pero, los anfitriones no ofrecieron demasiados resquicios, jugando con experiencia y sumando puntos valiosos, por la forma, como el conquistado por Graeme McDowell o el medio de Justin Rose.

   Watson apostó por sus jóvenes y tres de sus líderes en los primeros seis partidos en busca de presionar, pero sólo sacó tres puntos y medio, dos de ellos, los de Phil Mickelson ante el escocés Stephen Gallacher y el de Matt Kuchar ante el danés Thomas Bjorn cuando el marcador ya estaba muy encarrilado para los del Viejo Continente para el que Sergio García dio un punto con todo ya decidido.

   Europa fue el primero en sumar puntos a su casillero. Jordan Spieth dejó pasar la oportunidad de presionar desde el principio al perder por 2 y 1 ante el norirlandés Graeme McDowell. El joven americano entró en los segundos nueve hoyos tres arriba, pero a partir de ahí, 'G-Mac' empezó a funcionar y ayudado por el nerviosismo de su rival provocó que se llevase cinco de los seis primeros hoyos y diese un punto que, por momentos, pareció perdido.

   Antes de que McDowell, ganador de sus tres puntos en esta Ryder, diese el primero a su equipo, los locales ya habían logrado otro por medio de Rory McIlroy. El norirlandés tenía un atractivo duelo con Rickie Fowler, pero sacó sus galones de número uno para solventarlo rápidamente por 5 y 4 después de empezar con cuatro 'birdies' y un 'eagle' que no encontraron respuesta de su rival.

   Los que vinieron por detrás tampoco dieron buenas noticias para los estadounidenses, salvo el de Patrick Reed, que le ganó en el 18 un ajustado duelo al sueco Henrik Stenson, que tuvo 'putt' para 'rascar' medio punto al menos. En compensación, Justin Rose, otro de los destacados, le arañó medio punto a Hunter Mahan, que llegó a ir cuatro arriba antes de que el inglés comenzase su alud de 'birdies' para salvar un empate en un hoyo 18 horriblemente jugado por su rival.

GARCÍA REMONTA Y GANA A FURYK.

   A Europa le faltaba entonces punto y medio para retener la copa, pero el alemán Martin Kaymer, a su mejor nivel, tenía muy dominado a Bubba Watson, al que sentenció con un senscacional 'approach' en el 16 para ganar por 4 y 2 y dejarlo todo en franquicia para los que venían por detrás, con el galés Jamie Donaldson cómodamente dominando a Keegan Bradley.

   El 'rookie' no acusó la presión de ir al final, y como toda la Ryder, jugó con una impecable solidez, asegurando primero en el 14 la retención de la copa y sentenciando la victoria en el 15, dejando ya en nada a excepción del honor los cuatro partidos restantes.

   Uno de ellos era el del español Sergio García frente al veterano Jim Furyk, duelo que se repetía por tercera ocasión tras las de 1999 y 2012. El castellonense no empezó bien, pero despertó en la segunda parte del recorrido, sobre todo tras un gran 'putt' en el 11.

   A partir de ahí, sacó todo su mejor juego para despedirse de esta Ryder Cup con un triunfo y sumar ya 20,5 puntos en la historia de la competición, igualando a José María Olazabal en el sexto del ránking histórica de Europa tras una edición donde dejó muestras de su calidad y pudo presumir de formar pareja con Rory McIlroy.

   Los otros tres partidos maquillaron el marcador visitante. El inglés Ian Poulter no tuvo que ser tan decisivo como en 2012 y empató con Webb Simpson para mantenerse imbatido en individuales y el veterano Lee Westwood no pudo con Jimmy Walker. El francés Victor Dubuisson, que jugó en el último partido, vio como Zach Johnson le empataba en el 18 evitando que los americanos encajasen la segunda derrota más abultada de la historia.

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