"Las niñas deben soñar ser como nosotras, no como Messi o Cristiano"

Verónica Boquete, la mejor futbolista española, que juega desde julio en el París Saint-Germain (PSG), pide que se creen referentes femeninos para las chicas que quieran ser futbolistas y elogia la honestidad del balompié femenino respecto al masculino.

En una entrevista con EFE, Vero Boquete (Santiago de Compostela, 1987) asevera que su ambición es ayudar a que el PSG sea "el mejor" de Europa y se muestra muy optimista sobre la selección femenina española, a la ve que compitiendo con los grandes "en un par de años".

Desde el apacible centro de entrenamiento de Bougival -al oeste de París-, la estrella de la selección española desvela además que en el futuro querrá ser entrenadora y opina acerca del machismo y de la maternidad.

P. Con Francia, ya son seis los campeonatos en los que has jugado (España, Estados Unidos, Suecia, Alemania y Rusia). Y has empezado bien. Ocho partidos y cuatro goles de momento.

R. No está mal, aunque mi especialidad sea crear juego. Mi entrenador (Patrice Lair) quiere que marque más goles. Me pide que chute más, que sea más egoísta. Aquí disfruto más en el campo, nos gusta tener el balón, atacar. En Alemania era un estilo más defensivo.

P. Estabas en el Bayern de Múnich y antes en el FFC Fráncfort, con los que ganaste la Bundesliga y la Liga de Campeones, respectivamente ¿qué te atrajo del PSG?

R. Necesitaba un estímulo. El PSG aún no ganó algo importante, es un proyecto que se está haciendo y quiero ayudar a que el club sea el más grande de Europa. Vivir una liga diferente también me enriquece como jugadora y como la futura entrenadora que quiero ser.

P. Por cierto, vas a reencontrarte en marzo de 2017 con el Bayern en los cuartos de la Liga de Campeones.

R. Estamos centradas en terminar bien este año 2016. Tenemos partidos complicados en diciembre (Juvisy y Lyon), pero será especial volver a Múnich. Será un rival muy duro, las conozco muy bien.

P. ¿La selección femenina de España está preparada para dar el salto de calidad que le falta?

R. A partir de ahora, España estará siempre en grandes torneos internacionales (...) El fútbol femenino español está en el mejor momento de su historia. Hay cada vez más talento, más apoyo, en un par de años podremos compararnos con las grandes potencias como Suecia, Alemania, Francia o Inglaterra.

P. ¿Qué le puede atraer a un espectador para acercarse a ver un partido de fútbol femenino?

R. Hay un gran desconocimiento del nivel del fútbol femenino. Un partido entre equipos buenos el nivel técnico y táctico es alto, aunque haya una diferencia física porque el hombre es más fuerte. El femenino es además un fútbol más puro, no se ve a gente simulando bofetadas, dolores que no tienen y faltas que no son.

P. Jugadoras de elite como tú o la brasileña Marta (cinco veces ganadora del Balón de Oro) habéis denunciado el machismo contra las chicas que quieren dedicarse al fútbol. ¿Cuándo va a cambiar esta situación?

R. No es fácil. Necesitas cambiar la mentalidad de varias generaciones. En los países nórdicos nos llevan muchos años de adelanto respecto a los países latinos, que están marcados por el machismo.

P. ¿Te consideras bien pagada?

R. Estamos muy mal pagadas si lo comparas con el fútbol masculino. Hay una diferencia de muchísimos ceros. Aunque que quede claro que me siento una privilegiada, porque conozco la situación de otras jugadores. Vivo solamente del fútbol y vivo bien.

P. Con el trabajo tan absorbente que tienes, ¿te planteas ser madre?

R. En Estados Unidos las jugadores de la selección tienen uno, dos o tres hijos. Tienen las ayudas necesarias para seguir su carrera. Si yo me plantease ser madre, tendría que dejar mi carrera. No me va a quitar las ganas, pero lo atrasará.

P. ¿Qué ídolos tuviste?

R. Desafortunadamente, todos mis modelos fueron masculinos. Cuando crecía no había referentes femeninos. Entre las chicas, el mayor era Marta, la brasileña, con la que acabé jugando en Suecia y de la que soy amiga. Las niñas tienen que soñar ser como Marta o como las jugadores que estamos ahora. No tienen que querer ser Messi o Cristiano Ronaldo porque esa no es la realidad.