En la noche del primer lunes de Cuaresma se celebró el Vía Crucis oficial del Consejo, que abre de par en par la esperanza para disfrutar una Semana Santa como la que se nos quedó pendiente en 2020, la imagen del Señor de los Afligidos fue la encargada de presidirlo, que estrenando una nueva túnica en terciopelo color berenjena, sobre la parihuela de la Hermandad de la Borriquita con un monte de lirios y siempre vivas moradas, iluminado por los faroles de entrevarales del paso de palio y dos candelabros.
A las 19.00 horas partía desde el antiguo Hospital de San Juan de Dios el cotejo de la Hermandad de Afligidos rumbo al primer templo portuense. Acompañado por un nutrido número de hermanos, su director espiritual D. Fernando Arjona SJ. y la Capilla Musical portuense Bellcanto, se encaminaron calle Palacios arriba hasta llegar a Plaza de España y entrar en la Basílica, lugar donde fueron recibidos por el la permanente del Consejo y el pleno de Hermanos Mayores.
A las 20.00 horas comenzó la Eucaristía que estuvo a cargo del Párroco y Rector de la Basílica D. Antonio S. Sabido, también Asistente Eclesiástico del Consejo, en la cual se realizó una de las peticiones por la Paz en Ucrania y en el mundo.
Una vez finalizada la Eucaristía comenzó el rezo de las diferentes estaciones del Vía Crucis, siendo la primera en el interior de la Basílica, el cortejo formado por hermanos de las diferentes hermandades de la ciudad portando hachones, los representantes de las Agrupaciones Parroquiales, Apostolado y hermanos mayores de las hermandades de penitencia y gloria, además del pregonero de la Semana Santa y miembros de la permanente. El Vía Crucis contó con los sones de la Capilla Musical portuense Vía Sacra.
