Vuelve un nuevo curso escolar en los centros educativos de la ciudad y la situación es la misma que en el curso anterior, porque los pasos de peatones no han recibido la atención adecuada por parte del equipo de Gobierno de PSOE e IU para estar a la altura de los escolares.
Los pasos de peatones de los alrededores de colegios e institutos no fueron pintados o repintados a principios del mes de septiembre de 2016, como entienden los ciudadanos que debería ser, sino que algunos se mejoraron a mediados de curso (los que con suerte se mejoraron), cuando los escolares ya llevaban muchos meses teniendo que acudir al colegio por estos. Por tanto, no recibieron la atención necesaria que merecen los alumnos y la comunidad escolar en general, y tampoco ha ocurrido este año.
Y en cambio es “una cuestión de seguridad de primera necesidad, porque los niños se pueden jugar la vida al cruzar”, explica Almudena A., que es profesora y madre. “Muchos de mis alumnos, los que viven cerca del colegio, vienen andando solos, porque ya están en quinto, pero en cambio yo les pido cada año que tengan cuidado porque me da miedo que puedan ser atropellados”, indica.
Pero en cambio el Ayuntamiento parece que no hace caso al requerimiento realizado por la comundidad educativa y por los padres cada año, ya que en muchos casos estos ponen al mismo nivel de importancia la necesidad de adecuar los centros educativos con obras de cara al nuevo curso y el repintado de los pasos de peatones.
Y además hay padres que consideran que “la presencia de la Policía Local en algunos de esos pasos de peatones no nos garantiza que un coche no nos coja. Porque además los policías no están en todo momento ni en todos los pasos de peatones, sino en los principales”, por lo que los secundarios por los que muchos alumnos y sus padres o tutores llegan a los colegios están desatendidos.
En general, la mayor parte de los pasos de peatones que rodean los colegios y los institutos no están en una situación de adecuación necesaria, y esta semana, que los operarios municipales deberían estar en las calles mejorando la imagen de estos pasos de cebra, no lo están. “No sé qué hay más importante que atender las necesidades de los escolares, porque antes de que comenzaran el curso deberían estar atendiendo las necesidades de los colegios”, explica V.L. un abuelo que el lunes comenzará a llevar a sus nietos al centro escolar.
Pero la pintura no es el único problema que acusan los pasos de peatones, ya que algunos de ellos también presentan problemas en el pavimento, que está agrietado o que cuenta con pequeños socavones que, con el paso del tiempo se van abriendo y finalmente provoca otro tipo de incidentes a los ciudadanos, ya que pueden sufrir caídas.
Otros, los menos en este caso, también acaban en una acera totalmente levantada por las raíces de los árboles, lo que supone un peligro añadido al de cruzar la calle, puesto que “cuando llegamos al final del paso de peatones nos encontramos con que no sabemos por dónde coger, si seguir por debajo de la acera o subirnos a ella y poder caernos”, explica una vecina de Valdelagrana, puesto que en las cercanías de algunos colegios de la zona se da esta situación.
Otra situación más grave que también se da en algunos centros o en sus cercanías es la ausencia de las señales verticales, lo que dificulta que los peatones puedan hacer valer su derecho de pasar y que los vehículos se tengan que parar, puesto que hay ausencia de dibujo en el suelo y señal vertical. En otros casos también hay pasos de peatones semi borrados por el paso del tiempo o rallados por los propios operarios, para colocarlos unos metros más allá de los anteriores, pero dándose la circunstancia de que ni uno ni otro se ve, por lo que la duda entre los peatones existe, y se genera duda también entre los conductores.
Por tanto, es de recibo que el equipo de Gobierno haga frente a una adecuación urgente y amplia a los pasos de peatones de la ciudad.
