La ayuda no llega y la cifra de muertos se aproxima a los 800
Muchos de los supervivientes del seísmo de 7,1 grados que golpeó el miércoles la provincia de Qinghai han pasado una segunda noche a la intemperie, bajo temperaturas mínimas, en espera de que llegue más ayuda a la zona y cuando los muertos ya ascienden a 791.