Obama, junto a una sonriente Kagan y al vicepresidente de EEUU, Joe Biden, declaró que la hasta ahora procuradora general ha demostrado “excelencia, integridad y pasión por la ley” y cuenta con una de las “mentes legales más preclaras” en el país.
El presidente estadounidense también destacó la “apertura a una amplia gama de puntos de vista” y la “imparcialidad” de la procuradora, de 50 años y originaria de Nueva York, cuyo nombramiento queda ahora pendiente de que lo confirme el Senado.
Obama hizo en su alocución un llamamiento al Senado para aprobar “tan rápidamente como sea posible, y con el apoyo de los dos partidos” a la procuradora para que pueda ocupar su sitio en el tribunal cuando comience la próxima sesión de deliberaciones, en octubre.
De ser confirmada, Kagan, quien sustituirá a John Paul Stevens, aumentará por primera vez a tres el número de mujeres entre los magistrados del Tribunal de más alta instancia del país, integrado por nueve miembros.