España

Fernández asume los retos de unidad y rentabilidad del vino

El nuevo presidente del Consejo Regulador anima a bodegas y productores a aparcar sus ?filias y fobias? para poder salir de la crisis

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  • En la imagen superior, Antonio Fernández y Clara Aguilera, junto a los alcaldes de Sanlúcar, Jerez y Trebujena. -
Antonio Fernández García asumía este miércoles la presidencia del Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen Jerez-Xérès-Sherry, Manzanilla de Sanlúcar y Vinagre de Jerez con los principales objetivos de unir a los distintos sectores que lo integran y lograr que el negocio vitivinícola sea rentable.

En rueda de prensa, el ex consejero de Empleo de la Junta de Andalucía reconoció que el sector arrastra “problemas coyunturales” derivados básicamente de su incapacidad para dar salida a la producción, lo que se traduce en un stock acumulado de 466.000 botas de vino que lastran la maniobrabilidad financiera del Marco. Por este motivo, una de sus prioridades pasa por “tratar de buscar el equilibrio” en el sector, para lo que es imprescindible que la “pelea” de los subsectores se convierta en una mera “defensa legítima de los intereses” de la industria y los productores.

En este sentido, Fernández se mostró dispuesto a “dialogar” y “trabajar” para que las “filias y fobias” propias de cada organización “queden aparcadas en la puerta del Consejo”, de manera que “los intereses comerciales” lleven a “posiciones comunes”.

El presidente del Consejo Regulador recordó a este respecto que “la historia está para aprender y no para repetir los mismos errores”, considerando que actualmente existe “un ánimo absolutamente claro de cooperación y colaboración” entre los distintos actores del sector.

Fernández advirtió de que el Marco de Jerez tiene que “vender más y mejor”, con márgenes de rentabilidad “mayores que los actuales” y “dando respuesta a los nuevos consumidores”. En esta línea, consideró imprescindible trabajar en el terreno de la innovación, involucrando a la Universidad de Cádiz no sólo en la mejora de los procesos de elaboración del vino, sino también en el desarrollo de iniciativas encaminadas a adecuar su márketing a los nuevos consumidores.

En su primera intervención como presidente del Consejo Regulador, Fernández incidió en la necesidad de “poner en valor” el carácter “saludable” del vino de Jerez, avalado incluso por distintos estudios médicos. Este carácter distintivo de los caldos amparados por la denominación de origen puede contribuir de hecho a abrir nuevos mercados y a consolidar los tradicionales, partiendo de la base de la demanda social que existe de este tipo de productos.

LOS FLECOS DE LA OCM DEL VINO
El acto de posesión de Antonio Fernández como presidente del Consejo Regulador del Jerez contó con la presencia de la consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, que expresó así el respaldo institucional a este sector económico. Aguilera considera que los problemas que padece esta denominación de origen “no son en su mayoría exclusivos”, ya que se derivan en ocasiones de la actual OCM del Vino, que “no ha atendido en ningún caso las necesidades del sector vitivinícola andaluz”. En esta línea, Aguilera avanzó que Agricultura a abordar como asunto “prioritario” la necesidad de introducir una serie de modificaciones en la normativa europea, de manera que atienda en mayor medida “las necesidades de la producción y de la comercialización”.

Asimismo, la consejera defendió además que la renovación del Consejo Regulador del Jerez constituye un buen momento para “analizar” el desarrollo del Plan de Viabilidad que se puso en marcha el pasado mes de enero y trasladó a Fernández su intención de “evaluar” el desarrollo de este documento, para de este modo conocer “qué repercusiones ha tenido” “qué mejoras pueden introducirse”, incluso abrió la puerta a la posibilidad de que sea el propio Consejo el que gestione el desarrollo del Plan de Viabilidad.

"Hay que defender el jerez como Sanlúcar defiende su manzanilla”
De manera excepcional, el Pleno del Consejo Regulador contó con la presencia de Irene García, Pilar Sánchez y Manuel Cárdenas, alcaldes de Sanlúcar, Jerez y Trebujena, respectivamente. La regidora sanluqueña aprovechó su presencia para felicitar personalmente al nuevo presidente del Consejo Regulador, al que deseó los mejores deseos al en la misma tónica que el resto de sus homólogos de los dos municipios de la provincia. Por su parte, Sánchez recordó que el Ayuntamiento de Jerez, al igual que el de la localidad sanluqueña “siempre ha estado al lado del Consejo Regulador, y lo seguirá estando, trabajando desde el diálogo, el respeto y la colaboración”, partiendo de la base de que ambas partes trabajan en la defensa del vino. Una mención expresa hizo Fernández a la tierra de Sanlúcar en su debut en su nuevo cargo a la hora de hacer un llamamiento a los jerezanos de luchar por su vino. “Hay que defender el jerez como los sanluqueños defienden su manzanilla”, dijo.

El Consejo confía en revocar la propuesta de sanción de la CNC
Uno de los primeros asuntos que figuran en la agenda de trabajo del nuevo presidente del Consejo es la propuesta de sanción de la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) contra la institución que preside, Fedejerez y hasta nueve bodegas del Marco. Fernández se mostró confiado en poder “revocar” la propuesta de sanción “uniendo los criterios” de todas las partes personadas. De hecho, el próximo 16 de noviembre, cuando quedará visto para sentencia uno de los primeros expedientes, irá a “puntear” la posición ante la Audiencia Nacional por este caso “reiterando” el criterio concreto a la sanción del Consejo Regulador. Fernández entiende que la institución que preside ha actuado “en buena lid” ya que, en su opinión, el “papel regulador” del Consejo como organismo “no ha sido bien entendido”. Por ello, avanzó que en los próximos días mantendrá una “ronda de contactos” con las partes afectadas “para mantener un criterio” que permita “revocar” la sanción. Entre las bodegas sancionadas se encuentra Bodegas González Byass S.A, con 870.000 euros; las Bodegas José Estévez S.A, con 1.250.000 euros; a Bodegas Williams & Humbert S.A, con 2.300.000 euros; a las Bodegas Emilio Lustau S.A, con 400.000 euros; a las Bodegas Barbadillo S.L, con 900.000 euros; a Caydsa, con 28.000 euros; a las Bodegas J. Ferris M.C.B., con 135.000 euros; y a las Bodegas Pedro Romero, con 240.000 euros.

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