Ana Botella cumple el jueves un año al frente de la Alcaldía de Madrid marcada por la tragedia del Madrid Arena y con el reto de adelgazar la Administración.
Hace un año la 'popular' se convertía en la primera mujer en ocupar la Alcaldía madrileña tras la dimisión de Alberto Ruiz-Gallardón, que dio el salto al Ministerio de Justicia.
La propia Botella confesaba la semana pasada que las cinco muertes en el Madrid Arena han sido "sin duda lo que marca este año de gestión" en el Ayuntamiento.
También reconoció que cuando llegó a la Alcaldía era consciente de que 2012 iba a ser "el año más duro de la historia reciente desde el punto de vista económico", razón por la que se marcó desde el primer momento objetivos como que la ciudad "siguiera funcionando este año en algunas ocasiones mejor que el año pasado" y liderar un "esfuerzo para ajustar cuentas".
Tampoco se olvidó de algunas medidas encaminadas a la liberalización de procesos que facilitan una apertura más rápido para todo aquel que quiera abrir un pequeño negocio en Madrid o la atención a los sectores de población más desfavorecidos.
Botella defendió igualmente la necesidad de seguir dando pasos para conseguir una Administración "más racional y pequeña, sin pensar en el rendimiento electoral de pasado mañana", todo ello necesario para ir reduciendo la deuda, "fundamental para el futuro de los que vienen detrás".