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Denuncian víctimas civiles en un ataque de la ISAF contra los talibanes

Al menos 50 insurgentes murieron ayer en un bombardeo de la ISAF en el norte de Afganistán, que será investigado por la organización debido a las denuncias de la población local de que el ataque ha causado decenas de víctimas civiles.

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  • Imagen de uno de los camiones-cisterna que resultaron destrozados por los bombardeos de la ISAF. -
Al menos 50 insurgentes murieron ayer en un bombardeo de la ISAF en el norte de Afganistán, que será investigado por la organización debido a las denuncias de la población local de que el ataque ha causado decenas de víctimas civiles.

El bombardeo tuvo lugar por la mañana en la norteña provincia de Kunduz, mientras los talibanes permitían que los lugareños obtuvieran combustible de dos camiones-cisterna que habían robado horas antes, dijo a Efe el gobernador provincial, Mohammad Umar.

El gobernador había informado en un primer momento de la muerte de 90 personas –la mitad, civiles–, pero más tarde rectificó y fijó la cifra de víctimas mortales entre 50 y 60, la mayoría insurgentes.

Además, el jefe de la Policía provincial, Razaq Yaqubi, especificó casi al mismo tiempo que el bombardeo mató a 56 insurgentes y causó heridas a otros trece, y que varios civiles también perecieron durante la acción.

Ese balance se aproxima al difundido por el ministerio de Defensa de Alemania, cuyas tropas están presentes en Kunduz y que informó de la muerte de al menos 50 insurgentes en el bombardeo pero descartó “presumiblemente” las víctimas civiles, por boca de un portavoz.

La versión alemana choca con la de varios testigos citados por la agencia de noticias afgana AIP, que denunciaron la muerte de decenas de personas, entre ellas mujeres y niños, víctimas del ataque de la aviación internacional.

Y la oficina presidencial afgana emitió un comunicado asegurando que el presidente, Hamid Karzai, se encontraba “entristecido” por la noticia, y que ha nombrado un equipo para acudir a la zona e investigar el suceso, “que dejó unas 90 personas muertas o heridas”.

Los talibanes habían robado dos camiones en un falso control en la carretera que une las provincias de Kunduz y Baghlan, y luego intentaron llevarlos al distrito de Charsadah, según explicó a la agencia AIP el portavoz talibán Zabiullah Mujahid.

Pero los camiones quedaron atascados en un banco de arena, a campo abierto, cuando los secuestradores trataban de vadear el río Kunduz, de forma que los insurgentes permitieron que los civiles extrajeran el combustible de los vehículos.

Aunque situada en el norte de Afganistán y lejos de los principales bastiones de los insurgentes -en el sur y el este-, Kunduz tiene varias bolsas de población pastún, la etnia de la que provienen tradicionalmente los talibanes.

Según el portavoz insurgente, que denunció la muerte de 120 civiles, los talibanes avisaron además a los lugareños de que podía producirse un bombardeo.

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