“Concordia”. Ese es el deseo que Proyecto Hombre tiene para la zona de Marismas del Polvorín, donde la entidad está construyendo ya su nuevo centro ambulatorio, unas obras que han provocado la
airada reacción de los vecinos.
El director de Proyecto Hombre en Huelva,
Víctor Rodríguez, ha reconocido a
Viva Huelva que entiende la reivindicación vecinal pero asegura que la cesión de la parcela donde Proyecto Hombre construye su nuevo centro ha sido totalmente transparente. “Empezamos el proceso de cesión en 2019”, recuerda Rodríguez, explicando que
en ningún momento se realizó la operación de forma “oculta”. El expediente administrativo de la cesión, aclara, pasó su pertinente periodo de exposición pública “sin ninguna alegación”.
En cualquier caso, Rodríguez cree que
los vecinos de Marismas del Polvorín pueden estar tranquilos, porque la llegada de Proyecto Hombre al barrio no va a suponer ningún perjuicio para ellos. “Al revés, la zona donde se va a construir, las traseras de las vías de Renfe, está muy degradada y el hecho de tener un centro moderno, que cumple una función social, le va a dar normalidad a la zona”, explica.
El director de Proyecto Hombre recuerda que el centro que se está construyendo en Marismas del Polvorín es de carácter ambulatorio y que
sus usuarios son personas que están “en la última fase” del programa de tratamiento base, destinada ya a su reinserción social. También atenderá a familias dentro del programa de prevención de adicciones entre jóvenes. La gente, dice, “tiende a pensar que la adicción es un problema de la marginalidad pero no es así, no existe ese patrón”.
Actualmente estos usuarios, en torno a 80 familias, utilizan un local de alquiler situado en la calle Nicolás Orta, que Proyecto Hombre tendrá que dejar antes de final de año. Por eso, explica Rodríguez,
para la entidad es muy importante “que no se paralicen las obras” de las nuevas instalaciones, algo que ya ha pasado durante una jornada por las protestas de los residentes. Los vecinos, apunta Rodríguez, tienen que ser conscientes del enorme perjuicio que supone perder un día de trabajo en la obra.
“Proyecto Hombre está haciendo un esfuerzo grandísimo para hacer realidad este centro y hay mucha gente que está colaborando para ello, muchos de forma desinteresada”, dice.
En cualquier caso, insiste el director de Proyecto Hombre,
“lo más sensato es conocer primero antes de juzgar”. Por ello, invita a todo aquel vecino que tenga dudas sobre lo que supondrá la llegada de Proyecto Hombre a su barrio a que visite las instalaciones de Nicolás Orta y compruebe que allí la convivencia se desarrolla sin ningún tipo de problemas. “Lo decimos por activa y por pasiva,
cualquier persona que tenga duda puede venir a vernos y estaremos encantados de enseñarle lo que hacemos”, dice Rodríguez, recordando que Proyecto Hombre da su contrastada “garantía” al centro.
“Más que el miedo a atender a las personas tendríamos que tener miedo a no atenderlas”, afirma Rodríguez, insistiendo en la importancia de contar con centros como el de Proyecto Hombre en una sociedad en la que el consumo de sustancias por problemas de salud mental crece cada día.
Mientras Proyecto Hombre aboga por el acuerdo,
las protestas continúan en el barrio para que la parcela municipal se destine a otro uso social, tal y como se pensó hace 14 años.
La plataforma vecinal de Marismas del Polvorín se concentrará de nuevo este jueves, a las 20.00 horas, para que el Ayuntamiento dé marcha atrás y destine la parcela a unas instalaciones de uso público. Este martes han pedido una reunión con los responsables municipales para hacerles llegar sus demandas ya que
consideran que el Ayuntamiento debe tratar el asunto directamente con los vecinos afectados y no con la Asociación de Vecinos Yáñez Pinzón.
Uno de los portavoces de la plataforma, Manuel Jesús Prieto, asegura que los vecinos están “muy indignados” ante lo que
consideran una “maniobra política sucia”. Prieto explica que el Ayuntamiento está intentando “desmontar la protesta” ofreciendo a la Asociación de Vecinos Yáñez Pinzón un local para su sede. “A nosotros eso no nos convence porque l
o que queremos es que esta parcela siga siendo de uso púbico, queremos que el Ayuntamiento nos explique por qué ha cambiado su uso”, dice Prieto.
Los vecinos son conscientes de que el anuncio que el anterior alcalde, Pedro Rodríguez, hizo sobre la construcción de una sede para la Asociación Yáñez Pinzón en la parcela no llegó a concretarse formalmente pero
están estudiando sus opciones legales para saber si se puede reclamar la vigencia de algún tipo de contrato verbal.
Fuentes municipales han confirmado a Viva Huelva que están buscando “opciones”para solucionar el conflicto de la mano de la
Asociación de Vecinos Yáñez Pinzón. Desde la asociación no han querido hacer declaraciones al respecto.