El 14, en el Campus de La Rábida, graban en directo el concierto de su segundo trabajo discográfico: ‘Origen’. Ni que decir tiene que el grupo: Mon Domínguez, voz y guitarra acústica y Manuel Vargas, guitarras, se sentirá especialmente motivado por poder compartir con sus paisanos todas las ilusiones que llevan dentro. Con más de 60 conciertos ofrecidos por todo el territorio español, su participación en multitud de festivales, reconocidos por AECID para promocionar la marca España fuera de nuestras fronteras y con dos discos, de momento, en el mercado, VISIONSONORA es, sin duda, una banda en alza.
Tengo entendido que todo comenzó en vosotros cuando recibisteis, un día, en El Portil, la visita inesperada de Paul McCartney…
– (Risas) Quizás fuera su doble, pero lo que sí es cierto es que Manuel Vargas y yo coincidimos en un karaoke en donde cantaba un tema de Miguel Ríos, y a partir de ahí nos picaron muchos bichos: Lennon/McCartney, Hendrix, Morrison y un largo etcétera. El nacimiento de VISIONSONORA fue un tanto peculiar. Éramos amigos antes de plantearnos hacer música juntos, y ya adolescentes siempre que salíamos por la noche nos acompañaba una guitarra. Así que en nuestro grupo de amigos no faltaba la música. En la playa, la piscina o en el muro donde nos reuníamos todos, la guitarra estaba presente. De esta manera, espontánea y entrañable, nació lo que es ahora VISIONSONORA.
En la música de VISIONSONORA se notan ciertos dejos que son propios de aquel movimiento denominado rock andaluz. ¿Qué hay de verdad en ello?
–La verdad de la música es el subconsciente, pero hay conciencias y recuerdos que nos llevan a una certeza brutal. Manuel Vargas y yo éramos vecinos en El Portil y la música ha sido un enlace importante entre nuestras familias. Escuchar a su padre (José María Vázquez, guitarrista flamenco de los que tocan la guitarra en vertical, de la vieja escuela) junto a su tía, que siempre ha tenido una voz fantástica, interpretar canciones de Lole y Manuel, viajar al campo en el Citroën GS de mi padre oyendo a Alameda, ver en la habitación del hermano mayor de un amigo la impactante portada de ‘Hijos del agobio’ y escuchar el disco y quedarte estupefacto… todo eso está dentro de nosotros y forma parte de nuestro ser. Creemos que plasmarlo es lo más honesto pero a la vez lo más complicado, ya que vivimos en una época de mucha pose.
¿Qué importancia le dais al texto, a la letra, en vuestras composiciones?
–Intentamos que sea tan importante como la música y creo que VISIONSONORA se apoya en el texto, precisamente, para marcar su personalidad junto a la música y crear un estilo, el que todo artista busca durante toda su carrera. También creo que intentamos hablar, dentro de nuestra forma de hacer letras, de lo que nos pasa en nuestro entorno y no de realidades que no hemos vivido; porque sería como engañarnos a nosotros mismos y a la gente que nos escucha.
Con este segundo trabajo, ‘Origen’, ¿en qué han ganado el sonido y la voz?
–Han ganado en todos los aspectos. La producción de Nigel Walker ha sido espectacular. Es la primera experiencia que hemos tenido grabando con un productor. Anteriormente, íbamos a estudios donde se le daba al “botón rojo” y toda la responsabilidad del producto era nuestra. Tener la perspectiva externa de alguien que mima y admira tus canciones ha sido una experiencia inolvidable, que nos ha ayudado a mirar la música, la composición, los arreglos, etc. Aparte, la atmósfera que Nigel creaba para que el resultado final fuera el mejor posible, nos ha servido para ser mejores personas y mejores músicos. Hemos aprendido que al trabajo hay que ponerle esfuerzo, cariño y sensibilidad. Y con esta grabación han aumentado nuestras ganas de hacer y escuchar música, componer y seguir evolucionando.
¿Es una circunstancia desfavorable para el desarrollo de su carrera artística, el que VISIONSONORA tenga el cuartel general en Huelva?
–No creemos que a nivel artístico sea un hándicap, sino todo lo contrario: vivir aquí inspira. Lo que sí ha sido un gran problema, es que la escena musical onubense ha estado maltratada durante estos últimos 20 años. En Huelva hay mucho talento, buenas bandas y gente con inquietud, pero si no hay sitios donde tocar, no hay buenos conciertos a los que ir, puntos de encuentro donde los músicos interactúen y hablen sobre sus proyectos; todo ello, dificulta la unidad y compromiso con la música y resta valor a lo que los artistas hacen. Las redes sociales facilitan el acceso a tu música, pero no es suficiente y, además, fomenta ese "postureo" del que antes hablábamos y que tratamos en la canción ‘Estruendo’. La conclusión es, que si no conseguimos que en Huelva haya una escena musical activa y fuerte es difícil que se nos tenga en cuenta fuera, porque si nosotros mismos no nos tomamos en serio difícilmente lo harán los demás...
Por último, ¿qué se va a encontrar el público en la grabación del concierto de ‘Origen’?
–Este concierto será especial. Hace tres años ganamos el concurso ‘Rábida Rock’ (ahora Música Abierta) junto a nuestros amigos onubenses, ‘AntiLopez’, y desde entonces hemos recibido cariño, respeto y admiración por parte de la sede de la UNIA, en Huelva. También, será un nuevo reto, lo que nos hace sentirnos vivos. Nos dicen que VISIONSONORA es “otra banda” cuando tocamos en directo, así que queremos demostrarlo con esta grabación en la que contaremos nuevamente con Nigel Walker, y el público tendrá una oportunidad más de comprobarlo por sí mismo. Además, estrenaremos nuevas canciones y habrá colaboraciones con otros artistas; entre ellos,uno de nuestros ídolos de la música andaluza y española. Así que cumpliremos dos de nuestros sueños más deseados en lo que a la música se refiere. Para nosotros será, “el primer concierto del resto de nuestras vidas”.