El Juzgado de Instrucción número 3 de Huelva ha admitido a trámite una denuncia presentada por los padres de J.M.P.G. un menor onubense de 6 años que falleció en marzo de 2015 por lo que ellos entienden fue una negligencia médica al "no ser tratado correctamente de lo que inicialmente era una neumonía".
El niño murió el 25 de marzo en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla, donde ingresó el 19 de febrero, si bien los denunciantes creen que la negligencia se produjo en el hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva donde "no fue diagnosticado correctamente ni le practicaron las pruebas necesarias".
La denuncia, a la que ha tenido acceso Efe, se interpone por lo que consideran un delito de homicidio imprudente contra aquellas personas que resulten criminalmente responsable de los hechos y relata que todo comienza el 9 de febrero, cuando al menor acude a su centro de salud, en San Juan del Puerto, donde le es diagnosticada una gripe común.
A los cinco días, al no mejorar, desde dicho centro fue derivado al Servicio de Urgencias del Hospital Juan Ramón Jiménez, donde el facultativo que lo atendió "le administra apiretal debido a la fiebre" y le realizó una analítica de sangre y una radiografía de tórax en la que ya se apreciaba "afectado el pulmón derecho", si bien "dicha afectación no fue considerada por el médico lo bastante grave para hacer más pruebas diagnósticas al menor o proceder a su ingreso y observación", limitándose a administrarle antibiótico.
Se le diagnosticó "neumonía adquirida en la comunidad" y, posteriormente, se le dio el alta por "una supuesta mejoría" debido a que el "antibiótico suministrado estaba actuando".
Algo que mantienen no pudo ser porque no se le repitió la analítica y la única que se le hizo fue antes de administrarle el antibiótico, "por lo que no es posible que la supuesta mejoría pudiera observarse como consecuencia de la ingesta del mismo".
Precisan además que a pesar de llegar con síntomas de deshidratación, al menor no se le insertó una vía para administrar solución salina para rehidratar, tan sólo por vía oral, y que las pruebas diagnósticas fueron insuficientes, pues no se le práctico una ecografía para descartar el posible derrame, ya que el líquido pleural no se distingue en las radiografías, a pesar de que el estudio radiológico lo recomendaba.
El 18 de febrero acudieron al pediatra en el centro de salud quien decidió el traslado en ambulancia del menor de nuevo al hospital por su mala evolución donde quedó ingresado después de 7 horas esperando cama, realizándose una nueva radiografía y posterior ecografía que confirmó el derrame pleural bilateral encapsulado compatible con "empiema" (pus dentro del pulmón), lo que hizo necesario su traslado al Virgen del Rocío de Sevilla para drenarle los pulmones.
Una vez allí se le operó de urgencia y se informa a los padres dos días después, por la médica que lo atiende, que su evolución no es favorable, indicándoles "que sean conscientes de que el niño ingresó muy grave y con los pulmones encharcados en pus".
En los tres días posteriores se le practicaron tres operaciones más que no causaron una mejoría en el niño que continuó empeorando hasta fallecer el 25 de marzo.
A la vista de estos hechos y entendiendo que "poseen características que hacen presumir la posible existencia de una infracción penal", el titular de Instrucción 3 de Huelva, en un auto al que ha tenido acceso Efe, ha acordado la apertura de diligencias previas y ha citado a los padres a declarar el próximo 18 de febrero al tiempo que libra oficio para que desde ambos hospitales se le remitan distintos informes sobre lo ocurrido.