La candidata a la alcaldía por Adelante Huelva, Mónica Rossi, ha señalado este martes que la formación va a defender al cabezo de Mundaka y en general a todos los cabezos de Huelva de la depredación urbanística a la que ha sometido el alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, a estos espacios naturales, razón por la que se ha elaborado alegaciones contra este proyecto para tratar de evitar que “se desmantele nuestro patrimonio”.
Rossi ha indicado que desde Adelante Huelva “vamos a evitar la construcción de elementos en estas zonas y van a impulsar que sean declarados monumentos naturales para evitar así que el ladrillo haga mella en una de las señas de identidad más importantes que tiene Huelva”.
Para la candidata a la alcaldía, han sido 20 años de gobierno del PP y cuatro del PSOE en los que se ha ido urdiendo la amenaza contra este patrimonio, por ello, solo un gobierno verdaderamente de izquierda podrá “proteger los cabezos y convertirlos en verdaderos lugares de paseo y ocio para el disfrute de toda la ciudadanía”.
Rossi ha recordado que la plataforma Huelva Te Mira ha incorporado estas propuestas al programa electoral tras una reunión que mantuvieron con los grupos municipales de Izquierda Unida y Podemos antes de la confluencia y que recogen el sentir de protección de estos espacios.
Por su parte, el número diez de la candidatura, el arqueólogo José María García Rincón, ha explicado los motivos de las alegaciones que se van a presentar para intentar paralizar el proyecto de construcción en este cabezo y que han sido elaborada desde el Círculo de Patrimonio de Podemos.
García Rincón ha asegurado que este plan urbanístico “afecta al entorno de protección del Bien de Interés Cultural, con la categoría de Monumento, denominado Iglesia y Antiguo Convento de la Merced y además se encuentra dentro de la delimitación espacial del Sector B-2 de la Zona Arqueológica de Huelva, por lo que las construcciones supondrán una degradación de los valores “no sólo patrimoniales, sino ambientales y paisajísticos”.
Además en el proyecto constructivo se proponen edificaciones de entre entre diez y siete plantas que se corresponde con una formación natural que es continuación de las laderas del Conquero, cuyo expediente al perecer si sigue adelante para su declaración como Monumento Natural.
Para García Rincón, los valores de los cabezos saltan a la vista por lo que “no podemos permitir que este paisaje se forre con bloques de vivienda” destruyendo también fósiles de ballenas y de otros fósiles de la época terciaria.