La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, Carmen Crespo, y el director general de Endesa Andalucía y Extremadura, Francisco Arteaga, han firmado un convenio para colaborar en la restauración de varias zonas del Parque Natural de Doñana que resultaron afectadas por el incendio forestal de las Peñuelas de junio de 2017.
"Estamos comprometidos con Doñana", ha recalcado Crespo, quien ha apostado por hablar siempre de este espacio natural "en positivo" y ha apuntado que "todas las entidades que vengan a colaborar con nosotros en este objetivo común de toda Andalucía y de toda España, serán bienvenidas", ha informado la Junta en una nota.
La iniciativa, que forma parte del proyecto corporativo Bosque Endesa, conlleva una inversión superior a 130.000 euros y actuará sobre una superficie de 40 hectáreas de donde se plantarán alrededor de 18.000 árboles de especies autóctonas adecuadas a la zona entre las que se encuentran el alcornoque, el sauce, el fresno, el madroño, el mirto, el acebuche o el piruetano.
Para los trabajos de plantación, que se desarrollarán entre los meses de octubre y noviembre de 2019, en función de la pluviometría, está prevista la contratación de personas en riesgo de exclusión social así como la participación de entidades de voluntariado ambiental, siempre dando preferencia a las procedentes del entorno rural. Además, se reservará un espacio determinado para las acciones de reforestación participativa y se establecerán los medios materiales y humanos para el desarrollo adecuado de estas acciones.
Por su parte, Francisco Arteaga ha puesto de relieve que la colaboración público privada "va a permitir que se empiece a revitalizar este espacio con especies autóctonas y contribuir así, no solo a la recuperación del patrimonio que representa el Parque Natural de Doñana, sino también a que generaciones futuras puedan disfrutar de este emblemático emplazamiento único".
Además de la propia replantación, esta actuación supondrá la absorción de unas 3.565 toneladas de CO2 durante todo el periodo de permanencia del proyecto de restauración, previsto para 40 años. De hecho, la firma del acuerdo por parte de Endesa conlleva su inscripción en el Sistema Andaluz de Compensación de Emisiones y un compromiso por parte de la empresa en cuanto a la disminución de las mismas. En concreto, la entidad deberá elaborar un plan de reducción de emisiones con objetivo 2030 cuya aplicación se comprobará a través de informes anuales y realizará también cada año auditorías de emisiones de gases de efecto invernadero.
INVERSIÓN DE LA JUNTA
Carmen Crespo ha recordado que en 2019 se celebra el 50 aniversario de Doñana, apuntando al respecto que "estamos en su año y también en su restauración ambiental", a lo que ha añadido que la Junta de Andalucía "ha optado por la inversión en Doñana" destinando 14 millones de euros.
Entre otras acciones, esta dotación contempla la redacción del segundo proyecto de restauración --dos millones de euros--, que se suma al que actualmente se está ejecutando por valor de 2,49 millones de euros; las labores preparatorias del terreno que se repoblará en las que trabaja el Gobierno andaluz; las actuaciones para prevención de incendios --1,3 millones de euros--; y el desbloqueo e impulso de una inversión de ocho millones de euros para la mejora de los hábitat en el marco de la Red Natura 2.000. Por tanto, los trabajos de reforestación que se pongan en marcha gracias a esta cooperación público-privada se suman a la labor que realiza la Junta para la mejora de los terrenos.
'BOSQUE ENDESA'
Se trata de un programa de restauración forestal para la lucha contra el cambio climático y la regeneración del patrimonio natural. Su finalidad es la reforestación mediante técnicas de siembra y plantación de especies forestales autóctonas que garanticen una recuperación gradual del área afectada a lo largo del tiempo, lo que posibilita la creación de bosques más complejos que permitirán albergar a un mayor número de especies animales.
Además la presencia de distintas especies crea un bosque mejor preparado para soportar futuros incendios y, al contar con especies rebrotadoras, se garantiza la restauración natural de la masa arbórea.
A su vez, 'Bosque Endesa' contribuye a la lucha contra la desertificación del territorio y al mismo tiempo ayuda a revitalizar el entorno rural afectado por el incendio y a retirar de la atmósfera grandes cantidades de CO2.
