Un total de 4.811 personas residentes en la capital están recibiendo ayuda para la Dependencia, según datos facilitados por la delegada provincial en funciones de Igualdad y Bienestar Social, Carmen Álvarez.
De éstas, 2.279 están recibiendo los cuidados necesarios en su hogar, con la ayuda de un familiar. Éstas personas, convertidas en cuidadoras, dejarán de cotizar a la Seguridad Social a partir del mes de agosto.
Carmen Álvarez denuncia los recortes a la Dependencia y aseguró que “quienes cuidan a sus familiares dependientes se quedarán desprotegidos”. Y es que estas personas ya no tendrán la posibilidad de firmar un convenio específico con la Seguridad Social con el que se garantizaba su jubilación.
Igualmente, Álvarez denuncia la reducción de un 15% en la prestación que recibe la persona dependiente que recibe cuidados en su entorno familiar.
En las residencias están viviendo un total de 1.122 mayores, bien acogiéndose a las plazas concertadas por la Junta de Andalucía o aportando la ayuda vinculada a su estancia en la misma.
Un total de 274 personas se acogen al recurso de los centros de día, 14 de ellas con ayudas vinculadas a estos. De esta manera, la Junta de Andalucía aporta una cuantía al dependiente, que asume el resto del coste aportando su pensión. De esta forma ocurre, igualmente, en las residencias.
El servicio de ayuda a domicilio está atendiendo a 587 personas y un total de 12 se acogen al recurso de Teleasistencia.
Por el momento, los Planes de Atención Individuales (PIAs) están pendientes de asignar uno de los recursos que contempla la Ley de Dependencia a 137 personas, ya valoradas.
Desde que una persona solicita un recurso hasta la aprobación de éste pueden pasar más de seis meses.
Desde Igualdad asegura la delegada que se están efectuando los pagos y que no se están sufriendo retrasos en los ingresos. Los nuevos casos, asegura, seguirán atendiéndose.