Publicidad Ai
Publicidad Ai

Jaén

Un mar de olivos que reaviva cada campaña el turismo jienense

En plena campaña de recolección de aceituna en Jaén, los municipios que viven del aceite de oliva virgen extra abren sus puertas al visitante

Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Olivos. -

En plena campaña de recolección de aceituna en Jaén, los municipios que viven del aceite de oliva virgen extra abren sus puertas al visitante para dar a conocer la esencia de su producto insignia, con propuestas de oleoturismo que conjugan olivar, naturaleza, patrimonio cultural y gastronomía.

Este destino turístico gira en torno a una de las singularidades más importantes de la región, que son los 66 millones de olivos que conforman "un paisaje y un bosque humanizado único en el mundo", afirma a Efeagro el diputado de Promoción y Turismo de la Diputación de Jaén, Francisco Javier Lozano.

El OLEOTURISMO, UNA EXPERIENCIA TRASVERSAL

Precisamente, este es uno de los objetivos de la estrategia Oleotour Jaén, un producto turístico "experiencial y trasversal" que se retroalimenta con la riqueza natural, patrimonial, cultural y gastronómica de la zona.

En Oleotour participan 125 empresas de la provincia, de distintos segmentos del sector turístico: alojamientos, restaurantes, establecimientos de cosmética y salud y las propias almazaras.

El diputado destaca la expansión de los alojamientos rurales tematizados (caserías o cortijos), que se están rehabilitando para ofrecer al visitante una experiencia única al facilitar un acceso directo a la explotación agraria.

Sin duda alguna, el eje fundamental de esta propuesta es la visita a las almazaras de la región, subraya Lozano, con una oferta de casi 400 espacios, si incluimos cooperativas y entidades privadas.

Otro de los atractivos, explica, es disfrutar de la mayor concentración de espacios museísticos y centros de interpretación del olivar y el aceite, como el de Úbeda.

En la provincia de Jaén, el oleoturismo converge además con el turismo de naturaleza, al contar con 300.000 hectáreas de espacios protegidos, con cuatro Parques Naturales (Despeñaperros, Sierra de Andújar, Sierra Mágina y Sierras de Cazorla, Segura y las Villas).

"Somos el pulmón de Europa. Un sumidero de CO2", remarca Lozano, por lo que con esta "verdadera joya de la naturaleza" y "nuestra riqueza gastronómica, queremos trabajar en un modelo de turismo saludable", en el que el visitante se pueda "enraizar" en la vida y tradiciones de los 97 municipios de la provincia.

Para completar el viaje, Lozano recomienda la visita a dos ciudades Patrimonio de la Humanidad -Úbeda y Cazorla- y conocer la ciudad de Jaén, con sus dos restaurantes con Estrellas Michelín y su nuevo Parador de Turismo en el Castillo de Santa Catalina, además de los 2.000 yacimientos arqueológicos y las rutas de los castillos y atalayas -los más numerosos al sur de Europa-.

Y a la hora de disfrutar de la gastronomía jienense, hay que probar el cordero segureño, la trucha de los Parques Naturales, la cereza, los higos y las brecas, el espárrago, la carne de monte procedente de la actividad cinegética -en especial gamo, ciervo y jabalí-, las setas, los vinos de la Sierra Sur y los quesos.

LA CALIDAD COMO RECLAMO TURÍSTICO

Para el sector del aceite de oliva virgen extra, la calidad es una prioridad y por ello cuenta con tres sellos reconocidos: la Denominación de Origen (D.O.) Sierra Mágina, la D.O. Sierra del Segura y la D.O. Sierra de Cazorla.

El enclave del Parque Natural de Sierra de Cazorla arropa a 9 municipios que viven del aceite de oliva virgen extra, con un total de 31.500 hectáreas de olivar y una producción de 40.000 toneladas, y que presume de una calidad diferenciada que le confiere su variedad autóctona Royal, que combina con la Picual, típica de Jaén.

Según afirma a Efeagro el secretario del Consejo Regulador de la D.O Sierra de Cazorla, Emilio Tíscar, esta Denominación lidera la venta de producto envasado en Jaén, ya que las 10 diez entidades adscritas molturan de media entre 30 y 40 millones de kilos.

Tíscar confirma que el turismo se ha convertido en una pieza clave para revalorizar su aceite premium y aumentar las ventas directas, especialmente a los turistas de fin de semana y de escapadas, que "no quieren irse sin su provisión de aceite".

LAS ALMAZARAS SE ABREN AL CONSUMIDOR

Situada en las faldas de Sierra Morena se encuentra al almazara Aceites Oro Bailén, una empresa familiar considerada una de las mejores de España y que cuenta con el Premio AEMO 2013 y el de Mejor AOVE del mundo, en el World Top 100 Extra Virgin Olive Oils 2020.

Esta almazara, que exporta a 35 países, fue pionera en abrirse al turismo y, como señala a Efeagro su responsable de Turismo, Soledad Gallardo, hace cinco años decidieron adaptar sus instalaciones para contribuir a que el público conozca y sepa valorar los aceite de oliva virgen extra de la máxima calidad.

A través de una visita guiada, el turista puede adentrarse en el mundo del aceite de oliva y su proceso de elaboración: desde la recepción de la aceituna, su limpieza, el batido y la extracción, hasta el momento del almacenaje y envasado, terminando con una degustación comentada y un análisis sensorial.

La demanda de este tipo de turismo está creciendo porque los consumidores apuestan por la salud y quieren conocer cómo se producen los alimentos que están presentes en su dieta y de los que a veces realmente sabemos poco, subraya Gallardo.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN