La alcaldesa, Mamen Sánchez, ha lamentado hoy que la Junta de Andalucía haya “priorizado las necesidades de las grandes empresas” a la hora de aprobar la declaración de Jerez como Zona de Gran Afluencia Turística (ZGAT), una medida que en la práctica otorga libertad para que los establecimientos comerciales de más de 300 metros cuadrados de superficie puedan abrir todos los festivos que así lo deseen durante buena parte del año.
Sánchez ha advertido ya de que el Ayuntamiento está “estudiando acciones” para tratar de revertir la situación, un trabajo que hará de la mano de las asociaciones de comerciantes, consumidores y representantes del personal de las grandes superficies.
Una vez rechazadas las alegaciones que habían sido presentadas por el Consistorio, “siempre” cabe la posibilidad de que la Junta “dé marcha atrás con el decreto” y atienda el sentir de los municipios, que “de manera unánime” habían mostrado su rechazo a la adopción de esta medida.
“Quien piense que un domingo de julio o agosto el turista va a ir a comprar a una gran superficie se equivoca, porque el turista se irá a la playa y por la noche paseará por la ciudad para disfrutar de su gastronomía y su cultura. La Junta ha demostrado también un gran desconocimiento de las ciudades”, ha apostillado.
En esta línea, la alcaldesa ha insistido en la idea de que “al turismo no le hace falta que las grandes superficies estén abiertas”, asegurando por tanto que la medida adoptada por el Gobierno autonómico va más en la línea de responder a “una presión de las grandes empresas por abrir”.
Por su parte, el presidente de Asunico, Manuel García, entiende que esta flexibilidad horaria para los establecimientos de más de 300 metros cuadrados de superficie supone “un varapalo para el comercio minorista y los autónomos”. “La Junta tiene que dar marcha atrás a esta decisión, porque si no estaríamos poniendo una alfombra roja a las grandes superficies, ya que esto implica que puedan abrir prácticamente durante todo el año y nosotros no tenemos capacidad para hacerlo”, explica.
Manuel García apela igualmente a la necesidad de “estudiar medidas de presión” para tratar de evitar que la medida aprobada por el Consejo de Comercio de Andalucía pueda entrar en vigor en 2023, recordando que además del perjuicio que supone para los pequeños establecimientos también tiene consecuencias para los trabajadores de las grandes superficies, “que tienen que sacrificar los domingos” sin recibir una compensación económica por ello.
La asociación Acoje se muestra crítica con el Gobierno local
La presidenta de Acoje, Nela García, se mostró crítica con la gestión que el Ayuntamiento ha hecho de este asunto, dado que “en su momento no quiso solicitar una demarcación concreta” para esa Zona de Gran Afluencia Turística, “sino que simplemente actuó con el silencio administrativo”, y luego planteó unas alegaciones “que no estaban del todo justificadas”.
“Acoje solicitó en varias reuniones a la Mesa de Comercio en el mes de agosto para pedir una delimitación de esa zona y se desestimó”, aseguró Nela García, considerando que quizá de este modo se podía haber logrado el objetivo que se planteó finalmente en esas alegaciones de limitar al centro de la ciudad los efectos de esta medida, evitando así que se diera vía libre a la apertura de las grandes superficies situadas en zonas periféricas.
La Junta le dice a Sánchez que inste al Gobierno a cambiar la ley
El delegado territorial de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, Daniel Sánchez, recordó al Gobierno local que la Junta ha actuado “de modo ajustado a la legislación estatal en la declaración de ZGAT”, un hecho que “es conocido por la alcaldesa”, que quizá por ello “no hizo ninguna propuesta de delimitación” dentro del plazo que se habilitó para ello.
Sánchez instó igualmente a la regidora a reclamar al Gobierno central “en caso de disconformidad” con la ley, para que de este modo “se adecue a la realidad del pequeño comercio”. Según el delegado, de no haber intervenido, las grandes superficies tendrían vía libre para abrir durante todo el año.
