El Retablo de las Ánimas es una obra en serie realizada en escayola y esparto que en la década de los noventa se calcinó en un incendio provocado por las velas de culto que se encendían en la capilla del cementerio de San José.
Durante años estuvo almacenada la obra en uno de los patios del cementerio con idea de ser desechado por el estado en que se encontraba.
La intervención a que ha sido sometido por parte del gabinete de restauración municipal ha sido, propiamente dicha, una reconstrucción ya que se encontraba en muy mal estado de conservación. Su restauración ha tardado un año y medio aproximadamente y ha sido llevada a cabo completamente por Mercedes Corbacho.
La alcaldesa Gemma Araujo estuvo presente ayer en el acto de inauguración del retablo y agradeció la labor llevada a cabo por Corbacho como artífice de las mejoras incorporadas a esta obra. “Se trata de una labor callada encaminada al disfrute de todos los linenses y de los ciudadanos que visiten la capilla del cementerio”.
La alcaldesa señaló que se han cumplido dos objetivos, uno artístico y otro sentimental, y ha confirmado que existe más trabajo por delante como la restauración de otros elementos artísticos existentes en estas instalaciones, imágenes que no gozan de una situación buena y que precisan de mejoras. Todas estas obras pasaran al gabinete de restauración del Ayuntamiento para su cuidado.