La conductora sufrió varios pinchazos al tratar de zafarse del atracador
El sector del taxi ha vuelto a ser el foco de una agresión, después de que una taxista fuera atracada a punta de navaja en la madrugada del pasado domingo por un cliente.
Luisa estaba de servicio de madrugada, circulando por las calles del centro de la ciudad, cuando un cliente levantó la mano requiriendo sus servicios en el cruce de la carretera de Málaga, a la altura del antiguo edificio de Bomberos y la plaza de Andalucía.
Eran las 8.30 horas, cuando el cliente, un joven de origen magrebí, se subió al taxi en el asiento del copiloto y le dijo a la taxista que lo llevara a Getares, aunque sin precisar el destino exacto.
Al llegar a la zona, la requirió para que lo dejara en los aparcamientos de la playa, junto a la urbanización Las Terrazas. Una vez en el lugar, la taxista le pidió el importe de la carrera, introduciendo el joven su mano en el bolsillo, en el ademán de sacar el dinero.
Sin embargo, en lugar de ello, sacó una navaja que colocó en el cuello de la conductora, pidiéndole el dinero de la recaudación y echando el freno de mano para impedir cualquier maniobra.
La taxista comenzó entonces a forcejear con el sujeto, que se había colocado frente a ella, y que le pinchaba de forma nerviosa en el cuello y el torso reclamándole el dinero.
Finalmente, tras sustraer todo el dinero de la recaudación y dos teléfonos móviles, el joven huyó. Tras interponer una denuncia en la Comisaría de la Policía Nacional, los agentes actuantes localizaron al joven, que había usado los propios teléfonos sustraídos para coger otros taxis.
El detenido, de origen magrebí, estaba de permiso del centro de reforma juvenil La Marchenilla. La taxista quiso agradecer ayer la rápida actuación y el trato humano recibido por el grupo II de la Unidad contra la Delincuencia Especializadas y Violenta (UDEV).