Las calles de Jerez acogen este sábado una manifestación de repulsa ante la condena a tres años de prisión impuesta por el Tribunal Supremo (TS) a un joven jerezano y a otras siete personas más por el bloqueo al Parlamento de Cataluña en el año 2011. Los padres de Ciro Morales, el activista jerezano condenado, se concentraron ayer la sede de la Audiencia Provincial de Cádiz en Jerez para protestar por la “injusta” sentencia del TS y anunciaron la movilización a la que esperan que se sume el mayor número de jerezanos. Ciro también se echará a la calle, pero lo hará en Barcelona.
Tras una pancarta en la que podía leerse “Yo también estaba en el Parlamento. Tres años por protestar”, los familiares del joven -que reside en Barcelona desde hace más de diez años- y representantes de los sindicatos CNT, CGT y SAT, mostraron su “solidaridad” con Ciro y el resto de los condenados. No dan crédito a la sentencia. La ven como “un castigo a la ciudadanía” y un “ataque a la libertad de expresión”. Fernando Morales, padre del activista, aseguró ayer su hijo “está muy preocupado” y calificó de “barbaridad” el fallo del Supremo que anuló la sentencia de la Audiencia Nacional que absolvía a los implicados en el bloqueo al Parlamento de Cataluña, procediendo a condenar a ocho de ellos a tres años de cárcel por delito contra las instituciones del Estado.
La familia de Ciro lo tiene claro: detrás de esta rectificación de la Audiencia Nacional hay intereses “políticos”. De igual manera, defienden que la protesta realizada en 2011 para rechazar la aprobación de los primeros recortes en materia de sanidad y educación públicas se trató de “una simple sentada en la que no hubo agresión física”.
Irán al Constitucional
La comisión de apoyo creada por la familia y sindicatos también advierte que el ingreso en prisión de Ciro Morales “puede ser inminente”. Por ello, su abogado ya ultima su recurso ante el Tribunal Constitucional y, en última instancia, llegarán al Tribunal de Estrasburgo si es necesario.
