El Ayuntamiento sigue sin perder la fe en poder cerrar en una mesa de negociación con los sindicatos los nuevos cuadros horarios de la plantilla municipal y el resto de medidas en las que desembocaría la implantación de la jornada de 37,5 horas semanales que tienen los empleados públicos. Unas nuevas condicionales de trabajo -enmarcadas en el nuevo Plan de Ajuste- que el Gobierno local del PSOE estaba dispuesto a aplicar desde el pasado 1 de junio y que siguen sin entrar en vigor por la falta de acuerdo con los representantes de las secciones sindicales.
En estos momentos, cuando está a punto de cumplirse un mes del primer plazo dado por el Ejecutivo local, la alcaldesa, Mamen Sánchez, asegura que están tratando de “cuadrar” los cuadrantes horarios trabajando “con los departamentos” para tener una propuesta, al no haberse constituido la mesa de negociación.
Según detalló ayer, a diferencia de otros ámbitos “muy fáciles” de la Administración local, como era de esperar son los departamentos abiertos al público cuyo horario va más allá de ocho a tres de la tarde, los que están resultando “más complicados”, al igual que los que compete a la Policía Local, como era previsible.
Pese a ser consciente de que en estos últimos casos un consenso va a resultar un hueso duro de roer, no pierde la esperanza. “Volveremos a poner el tema encima de la mesa y a hacer un intento de negociación, pero si hay impedimentos ya hay sindicatos que nos están haciendo llegar sus propuestas, con lo que miraremos las sugerencias de los que quieran negociar”, manifestó. Por otra parte, la regidora socialista también mandó ayer un mensaje de tranquilidad a los componentes de la banda municipal de música después de que las sentencias de los juzgados de lo Social de Jerez del pasado mes de marzo reconocieran la relación laboral entre los músicos y el Ayuntamiento jerezano, obligando a este último a readmitirlos con contratos indefinidos a tiempo parcial.
El Gobierno local socialista anunció entonces que no recurriría los fallos y que la treintena de músicos pasaría a formar parte del organigrama municipal. Sin embargo, la falta de partida presupuestaria ha retrasado el cumplimiento de la sentencia.
“Estamos hablando de sentencias judiciales que no estaban presupuestadas, y para esta readmisión hay que hacer una modificación presupuestaria que iba a salir de Cultura pero que lleva un proceso; el dinero hay que buscarlo y quitarlo de otra partida, pero se lo hemos dicho, que se les pagará desde que el día en el que el Juzgado dicen que tienen que estar en el Ayuntamiento”,aclaró.