Estas labores fueron supervisadas ayer por las ediles de Tráfico, Cristina Garrido, y de Fomento Económico y Empleo, Rocío Melgar, quienes comprobaron la instalación de estos sistemas, que funcionan con energía solar, por lo que el coste del mantenimiento de los equipos es muy bajo.
Las señales que advierten de la existencia de un paso de peatones cuentan con cuatro luces que se encienden de manera intermitente, aumentando la visibilidad especialmente de noche, lo que incrementa los niveles de seguridad vial. En la parte superior del mástil hay una placa fotovoltaica.
En total son diez los equipos instalados, seis en la Avenida Virgen del Carmen, concretamente en las glorietas de Ave María y Blas Infante, y cuatro en la Avenida Carlos Cano. La intención es ampliar su instalación a otras zonas de la ciudad.