El Unicaja logra mantenerse invicto en la fase de grupos de la Liga de Campeones FIBA con un dominio absoluto frente al JDA Bourgogne Dijon (88-68), en un primer tiempo sobresaliente en ataque, con Darío Brizuela y Dylan Osetkowski como más destacados, además de evidenciar su regularidad defensiva en este inicio de temporada.
Un 14-3 en apenas cinco minutos fue la materialización de un gran comienzo del Unicaja, que funcionaba muy bien con Kendrick Perry y Augusto Lima en el bloqueo y continuación y un acertado Tyson Carter en el tiro. Sin olvidarse de la buena defensa de un equipo que enlaza varios partidos muy regular en ese aspecto.
Llegó la rotación para el segundo tramo del primer cuarto, ya con el enmascarado Alberto Díaz -que sufrió en Girona un golpe que le rompió el tabique nasal- y Darío Brizuela en acción, y los malagueños mantuvieron el ritmo pese a alguna pérdida de por medio.
En David Holston y Markis McDuffie está el talento exterior del JDA Dijon, pero a un equipo tan coral como el de Ibon Navarro es difícil hacerle daño con solo chispazos. Se necesita consistencia en defensa y variantes en ataque, porque es precisamente lo que está forjando el Unicaja partido tras partido.
Un parcial de 11-0 fue aniquilador para los galos, que se fueron al descanso perdiendo por 43-25 en unos primeros veinte minutos donde el Unicaja divirtió a su gente y se gustó en ataque, sobre todo los cañoneros Brizuela y Dylan Osetkowski, dominando también el juego de asistencias: 12 de los cajistas por dos del Dijon.
Al regreso del descanso, mejoró el Dijon por dentro y amagó con recortar distancias, pero el Unicaja tuvo en Tyson Carter su seguro para afianzar la veintena de puntos de distancia. Un triple de Gregor Hrovat animó a los galos, que se querían meter en el partido (58-44). Paró el encuentro Ibon para evitar que esa minisiesta del Unicaja se prolongara: la BCL no admite despistes.
El partido adquirió una atmósfera gris, triste y trágica por el repentino
fallecimiento del histórico entrenador malagueño José María Martín Urbano. Un infarto cuando presenciaba el partido de su querido club en la zona de prensa dejó helados a todos. Los equipos sanitarios intentaron reanimarlo, pero no fue posible. El partido pasó a un segundo plano.
Un par de ataques con Brizuela como ejecutor volvió a alejar a los malagueños en el último cuarto, que amarraron el segundo triunfo consecutivo en la Liga de Campeones FIBA con una solvencia que hace pensar en el Unicaja como un serio aspirante a llegar lejos en la competición. Pero ya todo eso dejó de importar. José María acababa de fallecer y otra leyenda del baloncesto malagueño, como ocurriera hace no mucho con
Alfonso Queipo de Llano, se marchaba. Descanse en paz.
Ficha técnica:
88- Unicaja (25+18+20+25): Perry (9), Carter (10) Barreiro (8), Ejim (4), Lima (4) -quinteto inicial- Brizuela (15), Díaz (0), Osetkowski (16), Kalinoski (13), Will Thomas (3), Djedovic (0), Kravish (5).
68- Dijon (11+14+25+18): Holston (9), Brembly (0), McDuffie (18), Alingue (5), Hrovat (13) -quinteto inicial- Ducoté (8), Loum (4), Rousselle (3), Ware (2), Simon (6).
Árbitros: Lorenzo Baldini (ITA), Dariusz Zapolski (POL), Geert Jacobs (BEL)
Incidencias: Partido de la jornada 2 de la BCL, disputado en el Pabellón José María Martín Carpena ante 4.419 espectadores. Falleció en el Carpena, en presencia del partido, el histórico entrenador cajista José María Martín Urbano, de un infarto.
