En Málaga
se han retomado las protestas del campo. Los agricultores
han cortado durante tres horas (10.00 a 13.00 horas) la
carretera A-357 en el cruce de Zalea con una treintena de tractores. Las reivindicaciones son las mismas, porque aseguran que el Gobierno central “sigue mirando para otro lado”. En la provincia
preocupa especialmente la sequía y la entrada de productos de países extracomunitarios, por sus “bajos precios” y el “peligro para la salud”, como ejemplo han puesto lo ocurrido hace pocos días con la llegada de
fresas contaminadas de hepatitis A desde Marruecos.
Las organizaciones agrarias de Málaga Asaja, COAG, UPA y Cooperativas agro-alimentarias
han clamado por la dignificación del mundo rural y “vamos a estar en la calle, mientras no lo consigamos, porque el campo ha dicho basta ya”, ha dejado claro el presidente de Asaja Málaga, Baldomero Bellido. Las nuevas movilizaciones en la provincia son
la respuesta a la falta de acuerdo en la última reunión con el ministro de Agricultura, Luis Planas. “Hay que cambiar totalmente el rumbo de la política agraria común” en la Unión Europea y en España y las concesiones de Planas “no son todas las que pedíamos”. Las negociaciones continuarán, mientras las organizaciones
mantienen para la semana que viene otra movilización el 13 de marzo frente a la Subdelegación del Gobierno de Málaga.
Bellido asegura que el Ejecutivo tiene “total apoyo” de los agricultores “para que defienda nuestras exigencias a nivel europeo”, pero a nivel nacional
hay que ejecutar “obras urgentes”: “No solo hace falta que llueva, sino que se almacene la que cae y se regenere”. En la mejora de la política hidráulica también se dirigen a la Junta de Andalucía, recriminando a este gobierno: “
Hemos visto en prensa que garantizan el suministro de agua para el turismo, perfecto, pero queremos que también se garantice para la agricultura”.
“Lo que está pasando es muy grave”, ha añadido Antonio Rodríguez, secretario provincial de COAG Málaga. Tras un mes de protestas en Málaga, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “se tiene que sentar con los agricultores y
resolver esto de un plumazo”. Para Rodríguez, la
“falta” de control de los puertos fronterizos les está “arruinando” y “envenenando a los ciudadanos”, haciendo referencia la detección de Hepatitis A en fresas de Marruecos en un “control fortuito”: “
Se controla entre el 1 y el 5 por cientos de lo que entra.
Dios sabe lo que estamos comiendo todos los días, los políticos de la UE y de España quieren a toda costa que aquí entre alimento basura y barato, para seguir negociando con las grandes cadenas de distribución”.
A los agricultores “
nos tienen como mano de obra barata en Europa”, ha dicho el portavoz de COAG. El de UPA Málaga, Francisco Moscoso ha puesto datos a esta afirmación: “No puede ser que nos cueste más recoger el fruto que dejarlo en el árbol. En la zona del Guadalhorce
los limones se están cayendo al suelo, porque nos pagan a 4 céntimos la unidad, mientras que producirlo nos cuesta 50 céntimos”. Moscoso ha insistido en que las administraciones tienen que
hacer cumplir la ley de la cadena alimentaria y mejorar su aplicación, para evitar que el campo trabaje a pérdidas y los ciudadanos “tienen que mirar de donde viene el producto cuando lo compren”.
“
Cada día que pasa vemos que se aprueban medidas que van contra nuestros intereses”, mientras “cientos de agricultores cierran sus explotaciones”, ha continuado Carlos Cinta, gerente de la Federación de Cooperativas agro-alimentarias. El responsable ha sumado la necesidad de ayudas contra la sequía, reducir la burocracia y que el ministro “se siente con nosotros y
punto a punto nos haga caso”: “No puede ser que nos intente tapar la boca posponiendo la entrada en vigor del cuaderno digital y poco más”.