Málaga

El sector del taxi malagueño contribuye a la lucha contra la violencia de género con una campaña social

Una campaña pionera en Andalucía que comienza en la capital y se extenderá a toda la provincia

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El sector del taxi malagueño contribuye a la lucha contra la violencia de género con una campaña de información y concienciación social impulsada por el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM). Se trata de una iniciativa pionera en Andalucía, que se pone en marcha en la capital y que se extenderá a toda la provincia.

   La campaña contempla diferentes acciones, como la distribución de 4.000 colgadores informativos para la flota de taxis, la colocación de pegatinas de sensibilización contra los malos tratos en varios de estos vehículos, o la incorporación del número de información contra la violencia de género, el 900 200 999, en el reverso de las tarjetas de visita que suelen entregar a los clientes, según un comunicado de la Junta de Andalucía en Málaga.

   El delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo ha informado que en la iniciativa colaboran la asociación Taxi Unión, la Federación Andaluza del Taxi y la Asociación Unificada Malagueña de Autónomos del Taxi, Aumat, cuyo presidente, José Antonio Mate ha participado hoy junto al delegado y la coordinadora provincial del IAM, Estefanía Martín Palop, en la presentación de la campaña.

   Ruiz ha señalado dos carácterísticas especiales de esta iniciativa, una de ellas es que "permite universalizar el mensaje y la información  al llegar a un público tan amplio y diverso como es la clientela de los taxis que integra todas las edades, colectivos, nacionalidades, sexos, en definitiva al conjunto de la comunidad", y, la segunda, "más relevante, que el o la taxista es en muchas ocasiones la primera persona con la que contacta la víctima de malos tratos cuando huye de su agresor en busca de seguridad y protección".

    "Cuando las mujeres que sufren maltrato se ven obligadas a salir precipitadamente de su domicilio y recurren al servicio de taxi pueden encontrar la primera ayuda y asesoramiento en este colectivo profesional que llevará a partir de ahora en su vehículo un colgador en el que se contiene información básica sobre los recursos a los que pueden dirigirse, como el número de teléfono de información a la mujer,  los servicios que ofrece el IAM para atención y acogida inmediata y urgente, o la solicitud en el juzgado de una orden de protección", ha recalcado el delegado.

   Asimismo, la Asociación del taxi va a incluir en su programa de formación un curso específico de violencia de género que "permitirá" a este gremio profesional ampliar los conocimientos a este respecto y conocer pautas de actuación para ayudar a las víctimas de malos tratos en "un momento crucial de su vida". "Aquel en el que deciden escapar de su maltratador y buscar un nuevo futuro de seguridad y respeto para ellas y sus hijos e hijas", ha apostillado Ruiz Espejo.

   Por su parte, la coordinadora del IAM ha incidido en la necesidad de conseguir "la complicidad y la implicación" de todos los sectores de la sociedad contra la violencia de género, ya que "se trata de un problema social y debe ser la sociedad, mediante una movilización activa, la que asuma el papel decisivo para su erradicación", ha apuntado.

   Además, a este respecto, Martín ha recordado los datos de la última Macroencuesta del Ministerio de Sanidad y Servicios Sociales e Igualdad, según la cual  sólo el 27,4 por ciento de las mujeres que afirman haber sufrido violencia de género  presentaron denuncia. "Tenemos, por tanto, un 72,6 por ciento que no llegaron a denunciar nunca a su maltratador". De igual forma, en lo que respecta a Málaga, la coordinadora ha indicado que en el primer trimestre de 2013 se han producido  1.450 denuncias y el pasado año se cerró con 6.639.

   Por otro lado, el presidente de Aumat ha destacado el compromiso del sector del taxi, que "ha puesto toda la infraestructura posible a disposición de esta causa", señalando que "difícilmente se podrá encontrar un taxista que no se haya visto tocado por un caso de violencia de género", refiriéndose a estos profesionales como los primeros que asisten a las víctimas.

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