Un hombre ha sido condenado por la Audiencia de Málaga a 28 años y medio de prisión por haber matado el 3 de enero de 2016 a una prostituta, a la que estranguló con una correa de perro, tras lo que se apoderó de su dinero y prendió fuego al colchón de la cama, que se extendió por la vivienda.
El presidente del Tribunal del Jurado considera probado que el acusado contactó por teléfono con la mujer para concertar una cita en una vivienda de Málaga en la que ella ejercía la prostitución, donde mantuvieron relaciones sexuales en las que usó una correa de perro de cuero con una cadena de eslabones metálicos.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, el procesado aprovechó estas circunstancias, que impedían a la víctima "cualquier posibilidad de defensa", para estrangularla con la correa de perro, lo que le produjo la muerte por asfixia.
El acusado llevó el cadáver de la mujer al cuarto de baño, llenó la bañera, la puso de rodillas y le introdujo las manos y la cabeza en el agua, tras lo que registró la vivienda y se apoderó del dinero existente, cuya cuantía se desconoce.
Posteriormente, con el fin de borrar cualquier vestigio que le pudiera incriminar, quitó la tarjeta SIM al teléfono de la mujer, que era al que había llamado para contactar con ella, y le prendió fuego al colchón de la cama.
Ello originó un incendio que afectó al dormitorio y se extendió por el resto de la vivienda, lo que ocasionó daños a la escalera comunitaria del edificio y la vivienda superior.
El acusado, en prisión desde el 10 de febrero de 2016, tenía diversas deudas con varias personas que le estaban reclamando el importe de las mismas, según se señala en la sentencia.
De acuerdo con el veredicto del jurado, el tribunal condena a A.A.B. como autor de un delito de asesinato a 20 años y un día de prisión; le impone 3 años, seis meses y un día de cárcel por el delito de robo con violencia y 5 años y un día de prisión por el de incendio.
Además, deberá indemnizar al marido de la víctima con 20.000 euros y con 40.000 euros a cada uno de los dos hijos que deja la mujer, de otra relación distinta, los cuales residen en Colombia.
La sentencia también fija una indemnización de 11.505,08 euros para la compañía de seguros del propietario de la vivienda en la que se produjo el incendio, y de otros 6.845,25 euros a la aseguradora del edificio cuyas zonas comunes sufrieron desperfectos.
