El Gobierno está comunicando a prácticamente todos los inmigrantes internos en la prisión de Archidona, convertida en CIE desde que arribaron a la costa española el pasado noviembre, la orden de expulsión. Lo está haciendo con abogados de un turno de oficio creado especialmente para este menester en Antequera.
La intención, según ha sabido este periódico, es que salgan de allí antes del fin de semana. Ya han abandonado las instalaciones unos 80 inmigrantes del más de medio millar que ingresaron, y lo han hecho con destino a su país de origen.
La razón del incidente registrado al mediodía de ayer, según las fuentes consultadas por este periódico, tiene más que ver con esta circunstancia que con la falta de comida, como se informó. En este sentido, los inmigrantes que llegan a España saben que las estadísticas les son favorables a sus intereses. Y que el 70% de ellos, por lo general, permanece en España una vez que sale del CIE.
Pero en Archidona la realidad es otra. En este caso, muy pocos, únicamente los solicitantes de asilo, se van a quedar en España. Ocho o diez personas, como mucho. El resto van a ser expulsados a su país.
Según las fuentes consultadas por este periódico, la intención es que antes del fin de semana no queden allí inmigrantes. Seguramente para desactivar las nuevas protestas convocadas para la semana próxima ante la prisión.