Los agentes de medio ambiente de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales continúan la investigación, que se inició pocas horas después del comienzo
Las actuaciones del grupo de bomberos forestales que acudieron a la extinción del incendio de Sierra Bermeja (Málaga) en los primeros momentos el pasado 8 de septiembre han sido objeto de una reconstrucción este martes como parte de la investigación que trata de esclarecer las causas del siniestro.
Los agentes de medio ambiente de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) continúan la investigación, que se inició pocas horas después del comienzo del fuego para determinar la causa y motivación de las llamas, tareas que no han finalizado, según han informado fuentes de la Junta de Andalucía.
En ese contexto se ha llevado a cabo una reconstrucción de las primeras actuaciones para concretar qué vieron los primeros efectivos en llegar a la zona y qué acciones se llevaron a cabo.
Estos días se han realizado inspecciones oculares para determinar las posibles áreas de inicio, y la causa quedará reflejada en el informe técnico-pericial que se redactará.
La brigada BIIF está especializada en determinar los motivos de los incendios forestales e identificar al autor del fuego.
La extinción completa del incendio, que se cobró la vida de un bombero forestal, obligó a desalojar a 2.600 personas de seis pueblos de la sierra, y es el primero de la península Ibérica catalogado como "de sexta generación", continuará varias semanas tras su control en el día de hoy, a lo que ha contribuido la lluvia registrada en la zona.
Un incendio "de sexta generación" es más peligroso que los corrientes, entre otras cosas por la aparición de pirocúmulos o nubes de humo que se condensan sobre el fuego al ascender el aire caliente con vapor de agua y cenizas y, si llegan a desplomarse, el efecto es como si lloviera fuego.