La secretaria general para el Turismo de Andalucía, Susana Ibáñez ha pedido prudencia a la hora de valorar el impacto de la salida del Reino Unido de la Unión Europea, para nogenerar incertidumbres ante un proceso que está en estos momentos en fase embrionaria. En este sentido, ha sostenido que la mejor forma para que Andalucía siga siendo atractiva para los viajeros británicos es continuar enriqueciédola con nuevas propuestas.
Ibáñez clausuró el jueves en Marbella las jornadas de la cátedra Rafael Escuredo cuya temática era las consecuencias del brexit para el turismo.
Especial refencia a Andalucía, ha indicado que la salida del Reino Unido de la unión Europea es un fenómeno de transcedencia para la industria turística, pero ha trsladado un mensaje de tranquilidad; ¨cualquier discurso pesimista solo nos llevará a aumentar la incertidumbre y el potencial efecto negativo".
Durante su intervención ha recordado que 2016 fue el sexto año consecutivo que este mercado emisor experimentó crecimientos en el destino y ha indicado que los registros más recientes apuntan a un aumento de llegadas de británicos hacia Andalucía.
Así, de enero a julio de este año se contabilizan casi un millón de viajeros alojados en los hoteles y más de cuatro millones de pernoctaciones.
De momento el "brexit", no ha afectado a la fidelidad que este mercado siempre ha mostrado con la comunidad andaluza. No obstante, ha indicado que es innegable que los efectos sobre la industria turística van a estar muy vinculados al porceso negociador de la salida, por lo que ha añadido que el sector debe tener un papel destacado en dichas negociaciones.
Ha detallado también la dirigente de la Consejería de Turismo algunas de las posibles consecuencias de la salida del Reino Unido de la UE y que tendrán incidencia en el turismo, como pueden ser la depreciación de la libra, el incremento de los precios de los billetes de las aerolíneas, el aumento de la burocracia por la expedición de visados, la eliminación de beneficios sanitarios en España para los ciudadanos británicos o la permanencia del "roaming".