Podría "diminuir significativamente la actividad económica" en el país
El Banco Central de Rusia (BCR) ha advertido de que el embargo comunitario a las exportaciones rusas de petróleo y de derivados de crudo por mar y la imposición de un precio tope al crudo ruso podría "diminuir significativamente la actividad económica" en el país.
"De las nuevas conmociones económicas capaces en los próximos meses de disminuir significativamente la actividad económica destacan el embargo a la exportación por mar del crudo ruso y sus derivados a Europa, y la imposición de un precio tope al petróleo ruso", indicó en su boletín de diciembre el Departamento de Investigación y Pronóstico del BCR.
A su vez, el ministro de Finanzas ruso, Antón Silúanov, afirmó hoy que "es prematuro" hablar de la influencia en el presupuesto del país del precio tope de 60 dólares por barril impuesto el pasado lunes por la Unión Europea, los países del G7 y Australia al petróleo ruso.
"Estamos preparando medidas de respuesta, la reacción de nuestras compañías a la imposición del precio tope", dijo el ministro, citado por la agencia Interfax.
Insistió en que la medida, adoptada como sanción por la campaña militar en Ucrania, atentaba contra el mercado.
"Pero al mercado no se le puede engañar", advirtió.
Siluánov recordó que el presidente ruso, Vladímir Putin, ya anunció que las petroleras del país no firmarán contratos en los que figuren precios regulados, techos a los precios.
Según el periódico económico ruso Védomosti, Rusia está evaluando tres opciones en respuesta al tope de 60 dólares por barril.
La primera opción sobre la mesa "es una prohibición total de la venta de petróleo a los estados que apoyaron el tope, incluso si compran el crudo ruso no directamente a Rusia, sino a través de un país intermediario o de varios".
La segunda opción, según las fuentes del diario, es la prohibición de exportar crudo de origen ruso bajo contratos que incluyan como condición un precio tope, independientemente del país receptor.
Mientras, la tercera posibilidad que estudia Rusia consistiría en fijar un descuento máximo para el petróleo Urals frente al Brent, de referencia en Europa.
La elaboración de la respuesta de Rusia al precio tope de su petróleo "está llegando a su fin", afirmó hoy en su rueda telefónica diaria el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, que añadió que será anunciada próximamente.