Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, el juez de menores ha tomado esta decisión de acuerdo con la petición del fiscal.
Tras tomar declaración a la detenida, el fiscal ha reclamado la medida cautelar dada “la gravedad de los hechos, los indicios racionales y contundentes de la participación de la menor en los mismos; para evitar el riesgo de que eluda u obstruya la acción de la justicia y para la custodia y defensa del menor expedientado, tal y como marca la Ley del Menor”.
La medida cautelar de internamiento, según establece la Ley del Menor, puede tener una duración máxima de seis meses prorrogables otros tres, y en el caso de que la detenida sea encontrada culpable estará internada un máximo de cinco años, con otros tres de libertad vigilada.
El fiscal jefe de Toledo, José Javier Polo, ha comentado ayer en rueda de prensa que la Fiscalía perseguirá la rigurosa aplicación de la ley, pero ha dejado claro: “No corresponde al fiscal delimitar cuál es la legislación adecuada, sino aplicarla en los términos que la ley del menor permite”.
“No queremos dar pie a ninguna idea de venganza ni queremos tampoco que la Justicia no actúe con serenidad”, ha declarado el fiscal jefe, quien ha matizado que aún no está decidido si la detenida será imputada por homicidio o por asesinato, pese a que minutos antes, en una nota de prensa, la fiscalía había calificado los hechos de “asesinato”.
La menor detenida, según el fiscal jefe, estará recluida en uno de los dos centros de internamiento que la Junta de Castilla-La Mancha tiene en la región y que están radicados en las provincias de Albacete y Ciudad Real.
FUNERAL DE LA MENOR
Cientos de personas, entre familiares, amigos y vecinos de Seseña, dieron ayer su último adiós a Cristina Martín durante la misa funeral que tuvo lugar a las doce del mediodía en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de esta localidad de la comarca de La Sagra y que se ha visto conmocionada por el suceso.
El alcalde ha apelado a la “madurez social” de los vecinos de Seseña “donde hay más de un veinte por ciento de inmigrantes” y ha pedido “prudencia” y “cautela”, porque, “no se puede ir a una caza de brujas por un hecho aislado”.
El párroco de Seseña, Juan Triviño, ha agradecido en nombre de la familia la presencia de todos los asistentes al funeral, cuyo cortejo fúnebre iba precedido por compañeros del instituto donde estudiaba la fallecida y del que era alumna también la detenida, de nacionalidad cubana.
Durante el recorrido de la comitiva fúnebre, varios amigos de Cristina, visiblemente afectados, han portado centros y ramos flores mientras los padres de la niña, destrozados emocionalmente, han ido en un vehículo tras el coche fúnebre.
La consejera Valerio ha trasladado el pésame a la familia a las puertas del cementerio de Seseña, y ha dicho que “hoy es un día de mucho dolor para Seseña, para la provincia de Toledo, para Castilla-La Mancha y para España entera”.
El deseo de la familia era incinerar el cadáver de la menor fallecida, pero, no ha podido cumplirse dado que la muerte de la menor está aún bajo investigación de la Guardia Civil y en pleno proceso judicial.
El cadáver de Cristina fue encontrado el pasado sábado por la Guardia Civil a 3,5 metros de profundidad en una fosa de una antigua cantera de yeso y, según la autopsia, se trata de una muerte violenta y la “causa última” de su fallecimiento se debió a la pérdida de sangre por los cortes en la muñeca.
La adolescente detenida era compañera de Cristina del instituto Margarita Salas de Seseña, que recibió una llamada telefónica suya antes de salir de casa el martes por la mañana, la última vez que fue vista con vida.
Varios amigos de Cristina han coincidido en que la discusión de la menor con la detenida se inició en el mercadillo del municipio, donde fue a comprar con su madre, y estuvo motivada por un chico. Además, han señalado que Cristina era “una chica muy buena” que “siempre pedía perdón” y “no era de pegarse”.
