Así lo ha ordenado la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Ontinyent, quien ha abierto una causa por un delito de incendio forestal y ha imputado al detenido, que deberá comparecer semanalmente en el juzgado, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.
La jueza ha tomado esta decisión después de escuchar la declaración del brigadista, para quien el Ministerio Fiscal no ha solicitado tampoco ninguna medida cautelar de privación de libertad.
Según la citada fuente, el juzgado no dispone de informe técnico alguno “que certifique las causas del fuego, su origen exacto o si ha sido provocado por una o varias personas”.
Únicamente cuenta con un atestado de la Policía Nacional en el que se hacen constar las sospechas de la presunta autoría del detenido.
Fuegos en Murcia
Mientras, el incendio forestal declarado en la tarde del martes en Calasparra ha quedado estabilizado y 600 personas se afanan ahora en extinguir un fuego que ha arrasado unas mil hectáreas, la mayor superficie quemada en esta comunidad desde el gran incendio de Moratalla de 1994, que asoló casi 30.000.
El fuego, originado en dos focos distantes en seis kilómetros en la Sierra del Molino, se declaró pasadas las 19 horas y, a consecuencia de las fuertes rachas de viento que soplaban entonces, se propagó en poco tiempo por las laderas norte y sur, hacia la cima.
Se trata del primer gran incendio, categoría que engloba a los que afectan a más de 500 hectáreas, registrado en la comunidad murciana desde el que tuvo lugar hace 16 años en Moratalla, y ha movilizado, en consecuencia, hasta a 13 hidroaviones y helicópteros de varias regiones, a 341 militares desplegados por Defensa y a miembros de la brigada especial de lucha contra los incendios del ministerio de Medio Ambiente, que hasta ahora no habían actuado nunca en esta región.
A fecha del 25 de agosto pasado, se habían declarado desde el 1 de enero en Murcia 99 incendios forestales.
