Francia está analizando las muestras de las armas químicas que, según ha denunciado este lunes el diario 'Le Monde', el régimen sirio ha utilizado en los últimos meses contra los rebeldes en Damasco, de acuerdo con un alto cargo francés.
"Las muestras han sido entregadas a nuestros servicios de Inteligencia por los periodistas de 'Le Monde'. Se harán pruebas sobre esas muestras y los resultados se conocerán en los próximos días", ha dicho, bajo condición de anonimato.
Además, la fuente ha revelado a la agencia de noticias Reuters que Francia ha llevado a cabo recientemente sus propias pruebas a partir de otras muestras que apuntan al posible uso de gases en el campo de batalla.
'Le Monde' ha denunciado hoy que las fuerzas gubernamentales han utilizado en repetidas ocasiones durante los últimos meses armas químicas contra las milicias insurgentes y contra la población civil en Damasco.
"Escuchamos una explosión, notamos el olor e inmediatamente comenzamos a tener problemas para respirar. Se nos nubla la vista y nos duele la cabeza", ha relatado uno de los combatientes rebeldes, identificado como Abdalá.
El diario francés ha asegurado que incluso uno de sus fotógrafos sufrió los efectos de los gases tóxicos supuestamente lanzados por las fuerzas 'assadistas' sobre el barrio damasceno de Jobar, cuando acompañaba a los milicianos insurgentes.
El 13 de abril, el fotógrafo vio a los combatientes toser durante los combates entre las casas en ruinas de Jobar. Inmediatamente se pusieron las máscaras de gas, pero ya habían inhalado el gas, por lo que muchos comenzaron a caer asfixiados y a vomitar. El fotógrafo sufrió cuatro días visión borrosa y trastornos respiratorios.
Un médico sirio, identificado como Hassan, ha asegurado que ha tratado a más de una veintena de afectados por los gases tóxicos de Jobar. "Decían que tenían problemas para respirar. Tenían sarpullidos, los ojos rojos y las pupilas contraídas. Sufrían náuseas, vómitos y algunos tosían sangre", ha dicho.
Otro médico, identificado como Zamir, ha sostenido que, tras la manifestación del 24 de marzo en el barrio damasceno de Adra, murieron dos personas y recibieron otros 39 pacientes con síntomas de intoxicación. Todos ellos fueron tratados con atropina, un antídoto al gas sarín y respondieron bien al tratamiento, aunque no se ha podido confirmar el tipo de agente químico utilizado en el ataque.
"En los dos meses que hemos pasado informando desde las afueras de la capital siria hemos sido testigos de casos similares en una vasta región", señala 'Le Monde'. "Su gravedad, su mayor frecuencia y la táctica de utilizar estas armas demuestra que no es sólo gas lacrimógeno, que ya se usa en todos los frentes, sino productos de un tipo diferente, mucho más tóxicos", relata.
NUEVO ESCENARIO
La fuente ha revelado que los ministros de Exteriores de Francia, Laurent Fabius; Rusia, Sergei Lavrov; y Estados Unidos, John Kerry; han coincidido --en la reunión que han mantenido este lunes en París-- en que si finalmente se confirma el uso de armas químicas en Siria, cambiaría el escenario.
"La cuestión de las armas químicas puede crear una situación diferente porque las divisiones sobre esta cuestión no son las mismas que sobre el conflicto sirio", ha explicado.
"Si tenemos suficientes elementos que convergen para decir que se han usado armas químicas, habrá que tomar decisiones con nuestros socios para examinar las posibles consecuencias", ha añadido.
Desde el pasado mes de marzo, Gobierno y oposición se acusan mutuamente de haber usado armas químicas en la guerra civil. Naciones Unidas ha accedido a investigar estas denuncias, pero el régimen sirio se ha negado a que se tengan en cuenta las de los rebeldes.
CONFERENCIA DE GINEBRA
Interrogado sobre la conferencia de Ginebra, que se celebrará el próximo mes de junio a propuesta de Estados Unidos y Rusia para buscar una solución pacífica al conflicto sirio, el alto cargo francés ha aclarado que "los tres países quieren que tenga lugar".
"Estamos avanzando, pero todavía es muy difícil. Si queremos reunirnos hacia el 10 de junio en Ginebra tiene que haber un gran avance", ha explicado. "Esperamos que sea cuanto antes, pero todavía hay varias cuestiones que deben resolverse", ha insistido.
La conferencia de Ginebra es el primer intento serio de la comunidad internacional para poner fin al conflicto sirio. Los principales escollos para su celebración son el rechazo de la oposición a los representantes propuestos por el Gobierno y la participación de Irán y Arabia Saudí.