Así, los agentes, además de cursar la correspondiente multa económica, inmovilizarán el vehículo hasta tanto el motorista no se coloque el casco y, “si no lo porta, o bien va a su casa a buscarlo, o bien va a comprarse uno, porque la moto va a quedar inmovilizada”, señaló Navarro.
Ésta es la medida más destacada de una campaña del uso del casco que fue presentada ayer en el municipio sevillano de Dos Hermanas por el director general de Tráfico.