El Gobierno húngaro anunció que presentará hoy un recurso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea para anular el sistema de cuotas que busca distribuir a los refugiados entre los países comunitarios.
"Hungría va a presentar hoy a la corte europea su recurso contra la decisión de la Comisión Europea acerca del asentamiento obligatorio de personas, migrantes, en territorio húngaro", dijo hoy el primer ministro Viktor Orbán durante un discurso público en Budapest.
"Si queremos, podemos parar el flujo migratorio", indicó Orbán sobre la cooperación de los países del Grupo de Visegrado (Hungría, Eslovaquia, República Checa y Polonia) en este ámbito.
El plan de reubicación se aprobó en septiembre por mayoría cualificada en una reunión de ministros del Interior de la UE en la que Eslovaquia, Hungría, Rumanía y la República Checa se opusieron a la decisión.
El primer ministro conservador recordó que la vecina Eslovaquia ya denunció ayer el sistema de cuotas ante ese tribunal, por lo que Budapest decidió dar el mismo paso, casi dos semanas antes de lo previsto con anterioridad.
Según ese sistema de cuotas, Hungría, un país de unos diez millones de habitantes, debería acoger a 2.352 refugiados.
El Parlamento húngaro aprobó el 17 de noviembre una ley en la que pedía al Gobierno que denunciara ante la corte europea el reparto obligatorio, al entender que es una medida peligrosa que "dispersa el terror" y hace peligrar la cultura de cada país.
Según ese texto, la decisión europea se aprobó "sin considerar el principio de subsidiariedad y los parlamentos nacionales no recibieron la posibilidad de articular sus opiniones".
Orbán consideró hoy que la crisis migratoria es un "intento para debilitar a las naciones" y agregó que diferentes políticos europeos decidieron dar un paso peligroso cuando "se abrieron las puertas de la Unión Europea a las masas de inmigrantes".
"Se formó una coalición absurda" entre traficantes de personas y defensores de derechos humanos, apoyada por políticos europeos, opinó el primer ministro húngaro.
El partido conservador gobernante, el Fidesz, ha reunido hasta el momento y en un mes un millón de firmas de ciudadanos húngaros en apoyo de las políticas del Gobierno en materia de refugiados.
El Gobierno ha comenzado hoy una campaña contra las cuotas en los diarios húngaros afirmando en anuncios a toda pagina que "las cuotas aumentan el peligro del terrorismo".
En esos anuncios también se indica que cada 12 segundos llega un refugiado a Europa.
"No sabemos quiénes son y qué quieren. No sabemos cuántos son los terroristas camuflados", se lee en esos anuncios.
Hasta el cierre de sus fronteras con Serbia y Croacia en septiembre y octubre, respectivamente, Hungría fue uno de los países de tránsito en la ruta de los Balcanes y casi 400.000 personas entraron en su territorio en su camino hacia el norte de Europa.
Casi 900.000 refugiados e inmigrantes han entrado este año en Europa, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones.